Tras el ataque perpetrado la madrugada del martes contra habitantes del municipio de San Sebastián Coatlán, en la Sierra Sur, el bloqueo que mantenían ciudadanos de aquella demarcación en un tramo de la construcción de la carretera Barranca Larga-Ventanilla fue retirado, por lo que los trabajos de la obra serán reanudados, informó hoy el secretario de Gobierno, Jesús Romero López.
Tras descartar que el ataque haya sido orquestado por el gobierno del estado, Romero indicó que en el lugar fueron abiertas zanjas, pero que éstas serán rellenadas para seguir con el proyecto.
Durante la conferencia de prensa del Gabinete de Seguridad del gobierno estatal, añadió que un delegado por la paz y elementos de la Policía Estatal se estaban desplazando a aquella zona.
“Me han informado que ahorita ya no hay bloqueo. Ahorita está subiendo el delegado de paz y la Policía Estatal; qué bueno que ya no haya bloqueo. Mencionan que hay unas zanjas y las vamos a tapar porque los trabajos tienen que continuar”, dijo.
Habitantes suspenden mesa de negociación
Asimismo, refirió que “por falta de condiciones” una nueva mesa de negociación que había sido programada para este jueves 29 de junio en San Sebastián Coatlán fue suspendida.
Hallan 100 casquillos en el lugar
El funcionario agregó que en el lugar donde se suscitó la última agresión fueron hallados “extraoficialmente” alrededor de 100 casquillos percutidos, pero 80 oxidados.
“Nos enteramos en la mesa, extraoficialmente, que se encontraron cerca de 100 casquillos, nada más que como 80 ya estaban oxidados. Hay que decir la verdad: está raro”, argumentó.
En relación con los hechos, aseveró que el Síndico de la comunidad había comparecido en la Fiscalía de Oaxaca para dar su declaración.
“Si alguien quiere ensuciar el tema o responsabilizarnos, no. No nos vamos a dejar y vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para saber si fue un grupo el que quiere desestabilizar la obra de alguna otra comunidad o cualquier actor ajeno a la región”, insistió.
Sobre el documento que fue hecho circular ayer donde se sostenía que el municipio de San Sebastián Coatlán y sus agencias culpaban al gobierno estatal de la agresión, lo calificó como un panfleto por carecer de firmas y añadió que era un intento para perjudicar el diálogo entre el gobierno y los inconformes.
Dijo que hasta esta mañana la Secretaría de Gobierno no conocía ningún posicionamiento oficial del municipio.
Sobre las exigencias de los pobladores, apuntó que éstos buscan respuestas a un nuevo pliego petitorio de 21 puntos, después de que la autoridad estatal y el gobierno federal han invertido en el aquel punto 500 millones de pesos durante los últimos años.
Pese a ello, refirió que la administración seguirá con las mesas de negociación a efecto de responder las peticiones.