La Unidad de Bienestar Social (Ubisort) exigió hoy al gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, “dar la cara por la zona” y reinstalar las mesas de diálogo para construir la paz en la región triqui, luego de la ocurrencia de al menos tres ataques armados durante los últimos dos meses con saldo de cuatro mujeres muertas.
La organización sostuvo que la región triqui de Oaxaca se ha convertido en “un polvorín político y en un foco rojo nacional donde las venganzas insensatas cobran vidas inocentes y enlutan hogares”.
El representante de la organización, Fabián Pereda, demandó al Poder Ejecutivo del estado coordinar un encuentro entre líderes y representantes de las tres organizaciones que coexisten en aquel punto y que en diversos episodios han protagonizado hechos de sangre, como son el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui (MULT), el Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI) y la Ubisort, en busca de acuerdos que deriven en la estabilidad de la región.
“Estamos haciendo un llamado al Gobernador para que convoque nuevamente a las mesas de trabajo de paz, que ya no han sido convocadas.
“Este momento que se está viviendo, esta desafortunada situación en la zona triqui, es el momento que el Gobernador debe dar la cara por la zona y convocar a las tres organizaciones para poder pacificar toda la situación que se está viviendo”, dijo Pereda, en conferencia de prensa, frente al Palacio de Gobierno.
Antes, en un pronunciamiento, la Ubisort reclamó que los acuerdos de paz “no se lograrán con buenas intenciones ni con falsos discursos; se debe actuar ya sin excusas ni pretextos para detener la violencia y los crímenes políticos”.
Luego, afirmó que los grupos políticos que existen en la región deben entender que “la violencia genera violencia”, por lo que deben “desterrar de sus filas” a quienes la provocan.
“Las organizaciones sociales representativas de la región triqui debemos apostar por la paz y desterrar todo intento de desestabilización que daña el tejido social de nuestras comunidades.
“Es momento de un cambio de mentalidad y abonar todos en un terreno fértil, donde florezca la paz y serenidad para todos nuestros hermanos triquis”.
La Ubisort informó que esa organización mantiene el control de la comunidad de Yerba Santa, Copala, donde en menos de una semana se registraron dos ataques armados; el último, el lunes pasado, contra el agente de San Juan Copala, Tomás Merino Fausto, y dos mujeres que lo acompañaban, con saldo de una de las ciudadanas muerta.
La víctima fatal respondía al nombre de María Gregoria Álvarez.
Cuatro días antes, el tres de agosto, otra mujer murió y tres más resultaron lesionadas después de que fue baleada una camioneta de la comunidad de Yosoyuxi Copala.
Los hechos ocurrieron también a la altura de la desviación de la Cumbre, Yerba Santa Copala, sobre la carretera federal Juxtlahuaca – Putla.
Y el 15 de junio, en el tramo carretero San Juan Copala-Concepción Carrizal, fueron atacadas dos mujeres que viajaban bajo protección a bordo de un vehículo de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI).
En el sitio murió una mujer identificada como Gertrudis Cruz de Jesús de 29 años, al tiempo que Licerina Cruz Merino, de 25 años de edad, pereció al llegar al hospital. Los elementos policiacos resultaron ilesos.