La Red Nacional de Abogadas Indígenas exigió la destitución de Adelfo Regino Montes como titular del Instituto Nacional de los Pueblos indígenas (INPI), tras acusarlo de haber encubierto los actos de hostigamiento sexual presuntamente cometidos por su hermano, Francisco Regino Montes, en contra de una ciudadana que trabajó en el INPI hasta 2021.
La organización respaldó las acusaciones hechas la semana pasada por la hoy ex funcionaria Adriana Hernández, en el sentido de que Francisco Regino le envío, de forma reiterada, mensajes sexuales e incluso le llegó a pedir favores íntimos durante su estancia en la dependencia federal.
De acuerdo con los señalamientos tanto de la agraviada como de la organización Consorcio para el Diálogo Parlamentario, Adelfo Regino ha estado al tanto de los señalamientos en contra de su familiar; sin embargo, le ha brindado protección.
“Condenamos la omisión en que incurrieron diversos servidores públicos del INPI en Oaxaca, así como en oficinas Centrales en Ciudad de México, quienes encubrieron dichos actos, incluyendo al propio Director General (Adelfo Regino) de dicho Instituto”, resaltó la organización, a través de un pronunciamiento.
“Nos alarma que las máximas autoridades de estas instituciones minimicen o ignoren la violencia en contra de las mujeres, añadió, al tiempo que sostuvo que “como mujeres indígenas, lo sucedido nos trastoca e indigna y no podemos quedarnos calladas porque abonaríamos a la cultura de la violencia contra las mujeres”.
La Red subrayó que antes del caso de Adriana, en Oaxaca ya habían sido documentadas diversas agresiones orquestadas por funcionarios públicos municipales, estatales y federales en contra de mujeres indígenas, como fue el caso del chat por WhatsApp denominado “Sierra XXX”, donde servidores públicos o varones ligados a la política, compartían imágenes que denostaban a las ciudadanas, al igual que en el grupo identificado como “Mega Peda”.
Todos los casos, condenó, han sido denunciados sin que hasta hoy los responsables hayan recibido castigo.
Ante ello, el colectivo de abogadas indígenas demandó la renuncia inmediata del actual director general del INPI, Adelfo Regino Montes, “por ser encubridor de su hermano y de todos los servidores públicos que fueron omisos ante tales hechos”.
Asimismo, las activistas y defensoras exigieron que el INPI cree una Unidad o Área de Género que brinde atención y acompañamiento en el interior de dicha institución, así como un protocolo de actuación interna con perspectiva de género e interculturalidad, para atender este tipo de casos.
Además, pidió la intervención de oficio de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) “para que investigue y dicte las medidas cautelares a favor de la victima y emita la recomendación correspondiente”.
A la Fiscalía de Oaxaca, demandó actuar de manera imparcial y que dicte las medidas de protección a favor de la víctima, al tiempo que a las integrantes de la Secretaría de la Mujer y al Instituto de la Mujer les exigió no ser “cómplices ni omisas”.
Sentenció: “No más folklorización: Queremos acciones contundentes para erradicar la violencia contra las mujeres indígenas. Rompan el pacto”.