Víctimas fatales por paso de los meteoros en Jalisco, Nayarit y Guerrero; en Colima un desaparecido; fenómenos dejan desbordamiento de ríos, colapso de viviendas y vías e inundaciones
Los fenómenos meteorológicos Lidia y Max dejaron cinco personas fallecidas, cinco lesionadas y una desaparecida en tres entidades, además de un número aún indeterminado de familias afectadas a causa de las inundaciones, desbordamiento de ríos y colapso de viviendas e infraestructura carretera.
El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, confirmó el deceso de dos personas. Una de ellas murió al cruzar un río en el municipio de Pihuamo y, la segunda, por un infarto en Autlán, tras la evacuación del hospital regional que se inundó.
Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil, también confirmó la muerte de un hombre por la caída de un árbol en Bahía de Banderas, Nayarit. Los tres fallecimientos corresponden a los embates del huracán Lidia.
Además, la tormenta tropical Max dejó dos personas muertas en Guerrero, una de ellas por ahogamiento, al caer a un socavón en la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, y una más por asfixia, al ser arrastrada por la creciente del río al intentar salvar sus vacas en una huerta de la localidad de Nuxco, en Tecpan de Galeana.
En su participación en la conferencia matutina, Laura Velázquez confirmó que el fenómeno meteorológico de categoría 4, que pegó en Las Peñitas de Tomatlán, Jalisco, se debilitó a baja presión sobre el sur de Zacatecas, con fuertes lluvias.
Explicó que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) realizaba las reparaciones de las carreteras federales 200, y estatales 554 y 556, y la reapertura de vialidades comunitarias.
Indicó que, hasta ese momento, había tres personas lesionadas: dos en Autlán de Navarro y otro en Cihuatlán, Jalisco, mientras que una más perdió la vida por caída de árbol en Bahía de Banderas, Nayarit.
En cuanto a la tormenta tropical Max, que tocó tierra en Petatlán, Guerrero, el pasado lunes, la funcionaria comentó que se degradó a baja presión en Michoacán, tras pasar por municipios como Benito Juárez, Atoyac y Coyuca de Benítez. Para atender la emergencia se movilizaron 976 elementos de Sedena, Marina y GN.
Protección Civil de Colima dio a conocer que, debido al paso de Lidia por la entidad, dos personas resultaron lesionadas y una desaparecida, por lo que la dependencia continuó su búsqueda.
La SICT Michoacán informó que la circulación en la autopista Siglo XXI permanecería cerrada por un derrumbe de tierra y piedras que bloquearon ambos carriles.
En Jalisco, Víctor Roldán, director general de PC, informó que 490 personas se encontraban en albergues tras el paso de Lidia en la entidad, y que en Cabo Corrientes y Tomatlán había obstrucción por árboles en vías de comunicación.
En cuanto a la energía eléctrica, señaló que la gerencia regional Jalisco-Nayarit-Colima, de la CFE, detalló que en Puerto Vallarta hay zonas afectadas, así como en Tomatlán y Cabo Corrientes tienen dos zonas con cortes de energía.
La propia CFE indicó que Lidia dañó el servicio de 194 mil 783 usuarios, que representan tres por ciento de los 6.4 millones de clientes en Colima, Jalisco, Michoacán y Nayarit, mientras que Max dejó sin servicio a 143 mil 226 usuarios en el estado de Guerrero, los cuales representan el 10 por ciento de 1.4 millones de los usuarios totales en el estado de Guerrero.
El Ejército mexicano, a través de la Comandancia de la Guarnición Militar y del 82/o. Batallón de Infantería, aplicó el Plan DN-III-E para auxiliar a la población civil tras el paso de Max y de Lidia.
En Michoacán, tras el desbordamiento del río Acalpican, el personal militar se desplazó a la tenencia El Habillal, donde resultaron 250 casas con afectaciones.
Fuente: La Razón
