En contra de su promesa de campaña, el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, solicitó al Congreso del Estado aprobar la contratación de deuda pública por 16 mil 911 millones de pesos, con el argumento de refinanciar los préstamos recibidos por el Estado en 2020 y con los que, teóricamente, ya había sido refinanciado el endeudamiento.
De acuerdo con una solicitud enviada a la Mesa Directiva del Congreso del Estado, que ayer fue turnada a comisiones, el préstamo será conformado por 16 mil 408 millones de pesos con los que se “refinanciará” o “reestructurará” el endeudamiento público de Oaxaca, más 503.04 millones de pesos para construir fondos de reserva de los créditos y 25 millones de pesos más para cubrir los gastos y costos relacionados con la contratación.
El planteamiento fue hecho por la Consejería Jurídica del Gobierno del Estado, que encabeza Geovany Vásquez, con la justificación de que el gobierno estatal, en diciembre pasado, se quedó sin la cobertura de los instrumentos que protegían al endeudamiento de las altas tasas de interés que actualmente se cobran en México.
La solicitud pide que se autorice “por conducto del Poder Ejecutivo, a través de la Secretaría de Finanzas, para la contratación de uno o varios financiamientos a largo plazo por un monto de hasta 16 mil 408 millones 712 mil 640 pesos, con instituciones financieras mexicanas… cuyo destino será el refinanciamiento y/o reestructura de créditos que forman parte de la deuda pública de largo plazo del Estado”.
El documento pide respaldo para “contratar un monto adicional al establecido en el primer párrafo de este Artículo Primero y en el apartado total del cuadro que antecede, por la cantidad de hasta 503 millones 46 mil 500 pesos… para constituir los fondos de reserva de los créditos o financiamientos que, en su caso, se celebren para refinanciar y/o reestructurar los créditos que forman parte de la deuda pública de largo plazo del Estado.
“También se autoriza la contratación de un monto adicional a los previamente autorizados hasta por la cantidad equivalente al 0.15 por ciento del monto de los financiamientos que se celebren, en su caso, para cubrir los gastos y costos relacionados con la contratación”.
El escrito justifica que cerca del 90 por ciento de la deuda se encontraba protegida de las tasas de interés por una serie de instrumentos que fenecieron en diciembre.
“Lo que se estima disminuiría el nivel de cobertura de la deuda del 90 por ciento actual al 27.5 por ciento al cierre de 2023”.