Su pareja sentimental, identificada como Emily Getsemaní “N”, también fue trasladada a Santa Martha Acatitla.
Eduardo Ramírez Tiburcio, alías “El Chori”, líder de la Unión Tepito, fue trasladado en un vehículo blindado Unimog, mejor conocido como “Rino”, al Reclusorio Preventivo Varonil Norte, junto a un fuerte dispositivo de seguridad liderado por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).
Fue el pasado 18 de marzo en la alcaldía Tlalpan de la Ciudad de México que Ramírez fue presentado ante el Ministerio Público, luego de un operativo realizado por elementos especializados de la SSC que llevó a su detención.
Fue en la carretera Picacho Ajusco donde los uniformados de la SSC que daban seguimiento puntual a “El Chori” lo detuvieron debido a que tuvieron conocimiento que su zona de movilidad era en el estado de Morelos y algunas zonas del Estado de México.
Y hasta la tarde de este miércoles, “El Chori” fue llevado de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) especializada en delitos de alto impacto ubicada en la alcaldía Azcapotzalco, hasta la zona de aduanas en el Reclusorio Norte, en donde continuará su proceso judicial.
El fuerte dispositivo de seguridad estuvo integrado por ocho camionetas de diversas agrupaciones de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México que trasladaron a Ramírez Tiburcio, custodiado por varios policías armados.
Tras un viaje de 45 minutos, “El Chori” ingresó a la aduana del Reclusorio Preventivo Varonil Norte. El presunto líder delicuencial fue esposado y con la cabeza agachada por agentes de la Unidad Metropolitana de Operaciones Especiales (UMOE), de acuerdo con el video compartido por periodistas y medios de comunicación.
INGRESAN A PAREJA A SANTA MARTHA
Durante el operativo del lunes 18 de marzo, el cabecilla de la Unión Tepito fue asegurado en compañía de Emily Getsemaní “N”, quien presuntamente es esposa de Eduardo Ramírez Tiburcio.
La mujer fue ingresada a prisión este miércoles al Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla.
Fuente: Vanguardia