En su caminar por las calles del Istmo, Carmelita Ricárdez no solo transita, sino que escucha atentamente.
Las mujeres expresan sus preocupaciones más urgentes, como la falta del Seguro Popular, vital en medio de tantas dificultades.
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Carmelita se compromete a hacer eco de estas voces y luchar incansablemente por el retorno del Seguro Popular.
“Escucho y comparto sus clamores. Juntas vamos a recuperar el acceso digno a la salud”, asegura con convicción.
Las señoras del Istmo encuentran en Carmelita una aliada, dispuesta a defender este derecho fundamental.
Avanzando paso a paso, Carmelita y las mujeres del Istmo marchan hacia un futuro donde la salud sea para todos, sin excepción.
