En el Día de la Libertad de Expresión, Carmelita Ricardez emerge como una voz valiente y firme que se suma a la de miles más que desafian los embates contra los periodistas en México.
En un país donde el ejercicio de informar se ha vuelto peligroso y sangriento, Carmelita Ricardez levanta la voz denunciando los abusos y exigiendo justicia.
El gobierno actual ha dejado una marca de maltrato hacia los periodistas, con actos atroces que han derramado sangre inocente. Pero Carmelita Ricárdez, desde su trinchera, rechaza enérgicamente esta violencia y se compromete a seguir luchando para que la libertad de expresión prevalezca sobre cualquier intento de represión.
Su voz resuena con fuerza, respaldando a los periodistas y otorgándoles el cobijo y la fortaleza que necesitan para continuar su labor vital en la sociedad. Para Ricardez, hay impunidad para aquellos que atentan contra la libertad de expresión; cada acto debe ser denunciado y castigado con todo el peso de la ley.
En un país donde la libertad de prensa está bajo asedio, Carmelita Ricardez se une en resistencia a quienes saben que la lucha por la verdad y la justicia es inquebrantable.