La Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) advirtió a los gobiernos estatal y federal que de no tener respuesta en los tiempos establecidos a las demandas estipuladas en su pliego petitorio, regresará a las calles para continuar las protestas que suspendió durante los últimos días.
Al término de la marcha convocada para este día, en el marco del 18 aniversario del fallido desalojo del 14 de junio de 2006, la dirigencia sostuvo que sus integrantes no se amedrentarán por los últimos enfrentamientos y conatos de bronca que protagonizaron tanto en la zona metropolitana de Oaxaca como en la Ciudad de México.
“Si nos tocan a uno nos tocan a todos”, advirtió la líder del sindicato, Yenny Pérez Martínez.
Asimismo, la dirigente demandó un alto a la criminalización que, afirmó, se ha promovido contra el magisterio desde el gobierno del estado, en una política de confrontación que tiene el objetivo de dividir a los padres de familia de los docentes.
Pérez Martínez sostuvo que el responsable del rezago educativo en Oaxaca no es el sindicato sino el gobierno que no ha implementado políticas públicas para rescatar a ese sector.
En ese sentido, resaltó que los niveles de retraso en infraestructura y nivel educativo es por el descuido de los gobiernos en turno.
La secretaria exigió respeto a la vida interna de la Sección 22, pues advirtió que el movimiento de los trabajadores de la educación no permitirá que lo sigan “denostando”.
Yenny Araceli Pérez fue la última oradora en participar en el mitin político que llevó a cabo el en el Zócalo de la ciudad de Oaxaca, tras la conclusión de la marcha efectuada esta mañana, desde el crucero de Trinidad de Viguera.