Los Juegos Olímpicos de París contarán con la participación del equipo de refugiados conformado por 37 atletas, de 11 nacionalidades, y que competirán en 12 disciplinas deportivas.
Por diversas razones, los atletas internacionales desfilaron bajo la bandera del Comité Olímpico Internacional (COI) como el Equipo Olímpico de Refugiados, que representa a más de 100 millones de personas que han sido desplazadas de manera forzosa en todo el mundo.
La selección del Equipo de Refugiados fue aprobada por la Junta Ejecutiva del COI y se basó en varios criterios, en primer lugar, el rendimiento deportivo de cada atleta y su condición de refugiado verificada por ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados.
También se ha tenido en cuenta una representación equilibrada de deportes y género, así como la diversidad de países de origen.
Los 37 atletas participarán en 12 disciplinas, mismas que son atletismo, bádminton, boxeo, breakdance, canotaje, ciclismo de ruta, judo, tiro, natación, taekwondo, halterofilia y lucha.
La delegación estará encabezada por la ciclista Masomah Ali Zada, originaria de Afganistán, quien también participó en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
El equipo está conformado por 15 atletas nacidos en Irán, cinco de Siria, cinco de Afganistán, así como dos representantes de Etiopía, dos de Sudán, dos de Eritrea y dos de Cuba.
Camerún, Sudán del Sur, República Democrática del Congo y Venezuela son las naciones del resto de la delegación.
La mayoría de los atletas fueron seleccionados a través del Programa de Becas para Atletas Refugiados, financiado por el programa de Solidaridad Olímpica del COI y gestionado por la Fundación Olímpica para los Refugiados.
Es la tercera vez que una delegación de refugiados participa en unos Juegos Olímpicos, sin embargo, será la primera vez que el Equipo Olímpico de Refugiados competirá bajo su propio emblema de equipo, un símbolo integrador que reúne a diversos atletas y le otorga a este equipo una identidad única.
Ya sea por razones políticas, por inseguridad, por la pobreza del país, los atletas han decidido representar al Comité Olímpico como símbolo de la resiliencia.