Mario Romero/Álvaro Morales
Rebasado por la frustración y el enojo tras la aprobación fast track en Oaxaca de la Reforma Judicial, horas después de que fue avalada en el Senado de la República, un trabajador oaxaqueño del Poder Judicial de la Federación soltó en llanto al advertir que el país se dirige a una autocracia.
Bernabé Hernández Flores, especialista en Derecho, cuestionó la actitud de los 41 diputados de la 65 Legislatura estatal, incluidos el PRI, el PRD y el PAN, que vía fast track, en seis minutos con 14 segundos, aprobaron alrededor de las 6 de la mañana la reforma constitucional para convertirse en el primer parlamento estatal en hacerlo, tras la luz verde en el Senado de la República y Cámara de Diputados federal.
El trabajador es uno de decenas que durante los últimos dos meses han permanecido en protesta y en plantón a las afueras de las instalaciones del Poder Judicial federal en Oaxaca.
“Es una pena lo que pasa en Oaxaca porque el otro día vinieron aquí los del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a darnos su apoyo y ahora amanecemos con que no hubo ningún voto en contra; bueno, ni siquiera discusión.
“Votaron… en 8 minutos se aprobó la reforma constitucional en Oaxaca: Sin discusión, sin ningún posicionamiento, que es lo mínimo que uno quisiera de sus diputados”, dijo el abogado entrevistado por Primera Línea MX en el Parque Juárez El Llano.
“No es que uno (quiera) necesariamente que estén a favor de nosotros o que compartan nuestra posición, pero mínimo uno espera que los diputados debatan, discutan, emitan posicionamientos sobre un tema tan relevante en nuestro país”, agregó.
Luego, advirtió que México está en vías de regresar al siglo 18 cuando un poder se sobreponía a otro, por lo que resaltó que él como trabajador se opone a la modificación porque no es el camino que requiere el país.
“Estamos presenciando la reforma más agresiva no de este siglo, de mucho tiempo en el pueblo de México. Estamos regresando al siglo 18 y nosotros habíamos pensado que eso ya se había acabado, estamos de regreso a la imposición de un poder sobre otro, a la instauración de un poder absoluto en el país.
“Eso sí debería preocuparnos a todos como personas, como ciudadanos. Cuando uno ve esto que sucede en el Congreso, queda decepcionado totalmente”, dijo mientras cada vez le era más difícil contener el llanto.
“(Siento) enojo… (hay) impotencia de todos los compañeros porque todos hemos luchado; aquí siempre hemos estado. El gobierno siempre pensó que el Poder Judicial federal nunca iba a ser capaz de salir a luchar y nosotros aquí estamos”, alcanzó a articular, antes de quedarse sin aliento.
“Estamos decepcionados del gobierno. Vamos directo a la dictadura. No han abierto los ojos lamentablemente…”, dijo otra ciudadana, que acompañaba al hombre.
“Es una decepción moral porque uno se prepara, estudia, con esta idea de servir al pueblo de México”, subrayó el ciudadano, luego de recuperarse.
Para entrar en vigor, la Reforma Judicial tiene que ser avalada, ahora, por más de la mitad de los congresos estatales de México.