El gobernador Salomón Jara Cruz solicitó 5 mil millones de pesos al gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum para la construcción de la presa Paso Ancho, que tiene el objetivo de suministrar de agua potable a la ciudad de Oaxaca; pero, es un proyectó que ya fracasó, y que es inviable, aseguró el director general del Instituto de la Naturaleza y Sociedad de Oaxaca (INSO), Juan José Consejo Dueñas.
La construcción de la presa Paso Ancho, dijo, está dentro de un paquete de megaproyectos que la actual administración estatal planteó al gobierno federales.
Entre la información que tienen confirmada, afirmó, es que para esta presa está pidiendo 5 mil millones de pesos y que tomará al menos cinco años para poder concluirse. El activista, sin embargo, afirmó que es probable que el costo aumente a más de siete mil millones de pesos y que no es una solución a corto plazo a la crisis de agua en la capital del estado y en los municipios conurbados que conforman la zona metropolitana.
“De todos modos nos parece inviable, caro y complicado; es decir, simplemente estamos hablando de que además de la presa, se tiene que construir un acueducto de 100 kilómetros porque se va a seguir el trazo de la carretera”.
Consejo Dueñas recordó el caso del acueducto de San Agustín Etla a la ciudad de Oaxaca, el cual se usa para suministrar del líquido a la capital oaxaqueña, que abarca una extensión de 12 kilómetros, y que no se ha podido renovar por la resistencia de las autoridades locales, de los “huachicoleros” (quienes extraen ilegalmente el agua de esta tubería) y otros intereses que se han creado alrededor de este tema.
“La pregunta es si en un tramo mayor, que es de 100 kilómetros, de veras ¿política y socialmente es viable? A nosotros parece que simplemente por eso, sería completamente inviable”.
El director general del INSO también recordó que la presa Paso Ancho es un proyecto fallido que tiene sus antecedentes en el gobierno de Gabino Cué Monteagudo, y también al final del sexenio de Ulises Ruiz Ortiz, en los años 2011 y 2012 cuando se presentó.
Fue un proyecto, aseguró, pésimamente ejecutado en su primera etapa e intentando saltarse la ley, lo cual provocó que Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) terminara por clausurarlo.
“Entonces, lo que decimos es: a ver, si nos están, digamos trayendo este zombi, que ya se había muerto, como la opción esta, nos parece que es una aproximación equivocada. Nos gustaría conocer el contenido completo del plan porque el Estado apenas lo acaba de presentar”.
