Jaime Allier Campuzano, presidente del Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal y de Trabajo del Décimo Tercer Circuito con sede en Oaxaca, sostiene que la reforma judicial no acaba con la autonomía del Poder Judicial de la Federación (PJF); al contrario, asegura, que se democratiza y es una oportunidad para acabar con el nepotismo y el influyentismo.
Aunque acepta que existe el riesgo de la intromisión del crimen organizado en la elección de jueces, magistrados y ministros, afirma que la creación de los comités de evaluación puede contener a la delincuencia organizada.
El magistrado Jaime Allier fue el primer oaxaqueño y magistrado del país en postularse como candidato a ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Su decisión de participar en la elección, contrario al desistimiento de la mayoría de jueces, magistrados y ministros, explica, fue porque encontró una posibilidad real para poder aspirar a ser ministro de la SCJN.
“Creo que es la aspiración legítima que tiene todo miembro del Poder Judicial Federal, todos los que hemos llevado la carrera judicial aspiramos legítimamente a ocupar el alto cargo de ministro de la Corte”.
El nepotismo dentro del Poder Judicial de la Federación, apunta, es una realidad y no se puede negar; pero este nuevo sistema, dice, abre las puertas a todo joven abogado titulado que aspire a esos puestos.
“Entonces yo creo que es una magnífica oportunidad que deben de aprovechar para democratizar más al Poder Judicial Federal”.
Sobre las críticas a la reforma relacionadas con la inexperiencia de los nuevos integrantes del PJF o la intromisión del crimen organizado, destaca la importancia de los comités de evaluación para seleccionar a los mejores perfiles; además, afirma que la experiencia se acumula día con día. Pero esto dependerá, dice, de la seriedad de estos comités de evaluación.
“Por ejemplo, de que puede infiltrarse la delincuencia organizada, puede infiltrar al narcotráfico, pero si se hace una evaluación seria de los perfiles, se puede evitar”.
Y en caso de que llegue a ocurrir la filtración del crimen organizado, agrega que también se creó un órgano disciplinario dentro del PJF, para que en caso de que un juez o un magistrado actúe incorrectamente, sea sancionado.
En su opinión, además, es falso que se haya acabado o avasallado con la autonomía de este Poder: “yo creo que depende de cada titular, si cada titular desempeña su función de manera seria, de manera profesional, creo que va a subsistir la autonomía, no nos dejemos amedrentar por amenazas, por presiones, y yo creo que si actuamos de esa manera va a subsistir la autonomía”.
Mientras que, sobre las críticas de organismos internacionales a la reforma, opina que se trata de injerencias a la soberanía nacional y puntualiza que el gobierno norteamericano no tiene porqué intervenir en las decisiones internas del país.
Jaime Allier prefiere no adelantarse y esperar a los resultados de los comités de evaluación, quienes seleccionarán a los candidatos dentro de todos los que se registraron y/o postularon; sin embargo, descarta de antemano que el partido Morena se “apodere” de las candidaturas y en consecuencia, del Poder Judicial de la Federación.
“Yo confío en que salgan del concurso gentes con conocimientos jurídicos, que les permita desempeñar la función de manera, idónea, por eso no quiero en ese momento prejuzgar al respecto”.
En relación a las acciones de inconstitucionalidad promovidas contra la reforma constitucional, pero coincide en la determinación de los ministros de la SCJN que señalaron que no existen mecanismos para combatir la el proceso legislativo.
“Si usted revisa la Constitución”, explica, “en el capítulo correspondiente a las acciones de inconstitucionalidad, el único supuesto que se prevé es cuando una norma general pugna con la Constitución; pero no se prevé un caso en que un artículo de la Constitución contravenga a otro artículo de la Constitución, que fue la postura del ministro Pérez Dayán”.
Para el magistrado, después de las protestas y paros, se va por terminar de asimilar la reforma judicial e hizo un llamado a los trabajadores del PJF a que se involucren en este nuevo sistema de elección de jueces, magistrados y ministros.
Jaime Allier, en cuanto a su registro para obtener la candidatura a ministro de la SCJN, expresa que tiene la preparación académica, con la experiencia judicial suficiente y es un anhelo de su parte ocupar ese puesto para ser ministro de la Suprema Corte.
“Quiero mencionarle que en el anterior sistema se llegaba a ser ministro a propuesta del Poder Ejecutivo federal, que presentaba una terna al Senado de la República, entonces con ese sistema no tenía ninguna posibilidad de ser ministro, solamente que fuera cercano al Presidente de la República, podría existir una posibilidad. En cambio, este nuevo sistema abre una puerta, creo que todos los abogados y sobre todo los miembros del Poder Judicial tenemos una puerta abierta para aspirar a ser ministro de la Suprema Corte”.