Hace más de cinco años, una familia originaria de Zacatecas llegó a Oaxaca y se instaló en el municipio de Tlacolula de Matamoros, donde compró terrenos en la colonia Yaveo e inició la construcción de sus casas.
Poco a poco, el poder económico de esta familia de apellidos Ramírez García empezó a crecer, supuestamente a través del negocio de arreglar máquinas de coser; pero paralelamente, impusieron un régimen de terror en contra de los vecinos.
De acuerdo con los habitantes de la colonia, los hombres y mujeres de esta familia los amenazan, han golpeado fuertemente a algunos vecinos, los amenazan con armas de fuego, continuamente están disparando al aire sus armas, y todos sus integrantes actúan en bloque para ejercer esa violencia.
Además, denunciaron que las mujeres han sufrido acoso sexual por miembros de esta familia, las siguen en sus vehículos, les ofrecen dinero; y al negarse, son víctimas de persecución y amenazas.
Hasta ahora, dijeron, no se han atrevido a presentar una denuncia contra estas personas por temor; sobre todo, porque los vecinos presumen que tienen protección de las autoridades municipales de Tlacolula de Matamoros, de la policía municipal e incluso, de la Fiscalía General del Estado.
“Desde que llegaron a vivir ahí, empezaron a molestar, a acosar, que súbete al carro, que si querías dinero. Tenía miedo, no acepté. Hasta mandaban mensajes, y amenazas. El problema es que los iba a demandar, pero son bien montoneros, no procedí con ninguna demanda por miedo.
“Uno no puede andar a gusto en la calle porque te andan siguiendo. Me paraban, me quisieron golpear varias veces, en la escuela, en la calle. Para evitar problema, nunca dije nada, porque te amenazaban”, relata una de las mujeres víctimas de acoso.
Los vecinos exigieron la intervención de las autoridades del Gobierno de Oaxaca, de la Fiscalía General del Estado y de la policía, ante las constantes amenazas y agresiones de las que son víctimas por parte de esta familia originaria del estado de Zacatecas.