La asamblea del ejido Mogoñé Viejo, localidad del municipio de San Juan Guichicovi, acordó mantenerse en resistencia ante la imposición del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, pese a los procesos penales que hay en contra de algunos de los habitantes.
En la reunión informaron que actualmente 13 ejidatarios y ejidatarias se encuentran sujetos a proceso penal, igual que tres integrantes de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni).
De acuerdo con el ex comisariado Ejidal de San Juan Guichicovi, Albino Pedro Juan, la inconformidad inconformidad con las obras de modernización de las vías del tren transístmico se remontan a marzo de 2018 cuando el gobierno federal, a través del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) realizó una consulta indígena en Jaltepec de Candayoc, una localidad de San Juan Cotzocón, con el fin de avalar las obras relacionadas con el CIIT.
A esa consulta, la comunidad ejidal de San Juan Guichicovi, no fue tomada en cuenta, pese a que por sus tierras pasan las vías del ferrocarril, y no así en Jaltepec de Candayoc.
Su inconformidad llevó a una mesa de negociación con los gobiernos federal y estatal, autoridades que se comprometieron a ejecutar obras de infraestructura en la población. Con el paso del tiempo, sin embargo, no cumplieron con ninguno de los acuerdos.
Este incumplimiento llevó a que un grupo de habitantes de Mogoñé Viejo detuviera las obras de modernización del tren transístmico por 72 días, hasta que fueron desalojados por policías estatales y elementos de la Guardia Nacional y de la Marina el 28 de abril de 2023.
En el desalojo fueron detenidas seis personas, cuatro de ellas mujeres. En respuesta, el gobierno ha presentado 17 denuncias penales contra 16 personas de la comunidad por el delito de ataques a las vías generales de comunicación.