“Las personas que sí hemos estado trabajando somos las que estamos aquí, afuera, y los aviadores están ahí adentro”, condenó la capacitadora invidente, Yaneli Ramírez, quien forma parte del grupo conformado por 677 personas que actualmente luchan por obtener la restitución de sus bases luego de haber sido despedidas en diciembre pasado y que hoy protestaron en el Centro de Convenciones.
La ciudadana, con 3 años de experiencia y que ha sobrevivido el último mes a través de donativos hechos por sus propios compañeros, habló al ser consultada sobre las acusaciones de corrupción que recaen sobre líderes de burócratas y gobierno estatal en el proceso de reinstalación de despedidos.
Los representantes son acusados de haber favorecido a familiares y allegados, con el aval de las autoridades.
“Dijeron que las personas vulnerables íbamos a ser reinstaladas, pero hasta el momento no me han llamado para ser reinstalada y me regresen mi trabajo porque la verdad lo necesito.
“Soy una persona que ha estado trabajando y no soy ninguna aviadora”, aseguró la joven, que tenía como centro de trabajo Ciudad Administrativa, comisionada en el Instituto de Capacitación.
La mujer indicó que cumplió diversos procesos antes de recibir su plaza, al desempeñarse primero como personal de confianza; luego, de contrato- contrato y finalmente obtener su puesto por tiempo indeterminado.
“He estado ya 3 años en el Instituto de Capacitación… señor Gobernador, le pedimos que seamos nuevamente reinstalados en nuestro trabajo porque no somos unos aviadores, somos personas que hemos estado trabajando todos los días para tener una vida digna; queremos la reinstalación, queremos que nos escuche a cada uno de nosotros”, indicó la mujer.
La ciudadana denunció que las autoridades incumplieron con el pago de aguinaldo y con el pago completo de su última quincena laborada.
En ese sentido, llamó al titular del Poder Ejecutivo a restituir los puestos que fueron revocados y posteriormente comenzar caso por caso un análisis de la legalidad de esos puestos a efecto de que sean cancelados.
En su caso, abundó, su familia es de escasos recursos y no pueden apoyarla al carecer de la economía que, recriminó, sí tienen los allegados del Gobernador oaxaqueño.
“Si él quiere que haga la revisión pero que la haga bien… que se hagan responsables de todo este relajo que se traen y que nos devuelvan el trabajo porque somos personas que lo necesitamos, somos personas que hemos estado trabajando, que nos levantamos día a día para poder tener un sustento”.
Consultada directamente sobre los presuntos actos de corrupción en las negociaciones pasadas, donde si bien hubo trabajadores que cumplían con sus deberes y que fueron restituidos meritoriamente, existen otros, según sus denuncias, que se tratan de personas allegadas a líderes sindicales, lamentó la situación.
“Ahí ellos saben lo que ellos tomaron en cuenta para poderlos reinstalar, pero se dice que son personas que jamás acudieron a trabajar y las personas que sí hemos estado trabajando somos las que estamos aquí afuera y los aviadores están ahí adentro.
“Ha sido una situación muy difícil. Gracias a compañeros que me han brindado su apoyo tanto emocionalmente como económicamente. A base de ellos me he mantenido porque el gobierno jamás nos depositó nuestra quincena completa y tampoco nuestro aguinaldo.
“Desafortunadamente mi familia es una persona humilde, de campo, que no tiene los mismos recursos que la familia del Gobernador para poderme ayudar. Yo estoy aquí sola, soy una persona con discapacidad y estoy luchando por un trabajo digno”, subrayó