La mañana de este martes, la tensión explotó en la colonia Luis Córdova Reyes, Ixtapaluca, cuando decenas de colonos se lanzaron contra policías municipales que protegían la conexión de un pozo a un predio particular. Armados con piedras y palos, los habitantes intentaron detener lo que consideran un robo descarado de su agua, mientras los uniformados respondieron con macanazos, dejando al menos dos heridos identificados como Derián ‘N’ y Carlos ‘N’.
El conflicto comenzó cuando el Organismo Público Descentralizado de Agua Potable (Opdapas) intentó conectar el pozo de la Ampliación 6 de Junio a terrenos supuestamente ligados a Guadalupe Rangel, una figura protegida por el alcalde Felipe Arvizu. Los colonos, apoyados por el Movimiento Antorchista, denuncian que esta obra beneficia a privados y deja sin suministro a cientos de familias, en una zona donde el agua escasea desde hace años.
Imágenes captadas por testigos muestran a policías golpeando a manifestantes, mientras otros vecinos arrojaban proyectiles en defensa propia. El enfrentamiento duró varias horas y dejó un saldo de lesionados aún no precisado por las autoridades. El gobierno municipal justificó la presencia policial como un operativo para garantizar la obra, pero los habitantes acusan represión y exigen la renuncia de Arvizu.
Este no es el primer roce entre colonos y autoridades en Ixtapaluca por el agua. En 2018, un caso similar en Tlapacoya dejó detenidos y heridos tras la oposición a otra obra hidráulica. Ahora, los residentes de Luis Córdova Reyes han convocado a una marcha este 15 de marzo frente al Palacio Municipal, prometiendo no ceder hasta que se cancele la conexión y se garantice el abasto para todos.