CDMX 23 de abril de 2025.- Organizaciones históricas de artesanos indígenas de la Ciudad de México urgió al Gobierno Capitalino a encontrar “una solución de fondo y de largo alcance” para ordenar y atender las demandas de las verdaderas organizaciones indígenas, que siguen esperando una respuesta a su demanda de espacios dignos para comercializar sus productos
Consideran que es fundamental que el gobierno de Clara Brugada inicie con la credencialización y el empadronamiento para tener cierto orden, al tiempo que denunciaron la presencia desde hace muchos años de grupos que se “desdoblaban y se convertían en lideres toda la familia”, para exigir al gobierno espacios de comercialización para acceder a las ferias itinerantes y que fueron poco a poco relegando a las organizaciones indígenas históricas.
A continuación, el texto del posicionamiento de estas organizaciones que llaman al ordenamiento del comercio de artesanías en la capital del país:
Más que beneficiar a algunos grupos u organizaciones indígenas que se dedican al comercio, el gobierno debería de buscar una solución de fondo y de largo alcance para todas las organizaciones indígenas que se dedican a esta actividad.
La Ley sobre los derechos de los pueblos y barrios originarios y comunidades indígenas residentes, mandata en su artículo 38,
Derecho al desarrollo 1. Los pueblos, barrios y comunidades tienen derecho a mantener y desarrollar sus sistemas económicos y sociales; a disfrutar de forma segura sus propios medios de subsistencia y desarrollo; a dedicarse a sus actividades económicas tradicionales y a expresar libremente su identidad cultural, creencias religiosas, rituales, prácticas, costumbres y su propia cosmovisión. 2. El comercio de productos artesanales, las actividades económicas tradicionales y de subsistencia de los pueblos, barrios y comunidades se reconocen y protegen como factores importantes para el mantenimiento de su cultura, autosuficiencia y desarrollo económico. El Gobierno de la Ciudad adoptará medidas tendientes a generar las condiciones que favorezcan la producción y el comercio de productos artesanales como manifestación de la cosmovisión y tradiciones de los pueblos, barrios y comunidades, entre ellas la regulación del comercio de productos tradicionales en la vía pública.
En la ciudad hay poco espacio acreditado para la venta de las artesanías, aunado a ello, muchas de las organizaciones no respetan el acuerdo con la autoridad para levantarse en la fecha autorizada. Y la autoridad tiene que dar a otras por su incapacidad de levantar a las que incumplen los acuerdos, lo que afecta el derecho de otras a ejercer la actividad en perjuicio de sus agremiados.
Exhortamos al gobierno, llámese Subsecretaría de Programas de Alcaldía a abrir espacios en las alcaldías que gobierna MORENA para que se deje descansar los lugares del centro histórico o de la alcaldía Cuauhtémoc, que ya están muy sobreexplotadas y ya no son aptas para los artesanos. En su caso, liberar los espacios un mes y luego autorizarlas bajo cierto orden.
La Mtra. Dunia Ludlow, subsecretaria de programas con la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, intentó una calendarización de las ferias itinerantes y las organizaciones asignadas para tales fechas, habrá que repetir el ejercicio, con algunos matices y se publicaba en la página oficial de la Subsecretaria de Programas…como ejercicio de trasparencia.
El problema que tuvo la Mtra, pensamos, fue por la existencia de grupos que se desdoblaban y se convertían en lideres toda la familia, para exigir al gobierno espacios de comercialización para acceder a las ferias itinerantes, ahí hubo molestias de las organizaciones históricas que tienen antecedentes como gestores de espacios y que fueron relegadas por estos grupos familiares.
Cabe señalar, que estos grupos buscan el lucro sin importarles la cultura, el rescate de la lengua, de la vestimenta, de la gastronomía, prefieren meter pizza, jarritos locos, crepas, cocina para comida corrida y productos que nada tiene que ver con la artesanía o gastronomía indígena.
Estos mismos grupos meten a artesanos que no son indígenas a las ferias itinerantes y a la fiesta de las culturas indígenas o los meten como tales a cambio de una “mochada”. Como respuesta, la subsecretaria de programas había instalado módulos para denunciar a los que venden espacios y no encontró eco.
Las organizaciones indígenas históricas, con antecedentes para el comercio, las que, si proponen, construyen y colaboran, son mayoría, mismas que sacan adelante las ferias itinerantes y las fiestas de culturas indígenas y la fiesta de las lenguas maternas el pasado 2024. Y aportan para la Visibilización de la presencia indígena en la ciudad, proponen alternativas para el rescate y preservación de las lenguas indígenas, proponen políticas públicas para los sujetos de derecho, etc.
Una de ellas, hizo la propuesta a la Mtra. Dunia Ludlow, cuando recién llegó a la Subsecretaría de Programas: el empadronamiento de los artesanos y la credencialización de los sujetos de derecho en la SEPI, pero no se pudo avanzar.
Ante la ocupación y permanencia indefinida en espacios para la venta de artesanías, mismos que se han ido disminuyendo por aquellas organizaciones indígenas que dicen tener derecho de ocuparlos, el gobierno no ha buscado ni encontrado una solución al respecto.
Están también las que -como ya se mencionó-, no respetan el acuerdo de 15 días con la autoridad y cierran calles para seguir ocupando el espacio autorizado afectando a otras organizaciones, muchas veces las mismas piden que el gobierno les ponga toda la logística. Esta situación estamos viendo desde diciembre del 2024 y siguen ocupando espacios como Dr. Mora, reforma 100, plaza santo domingo, gante, plaza san miguelito, explanada de pino Suárez, ya son tres meses y contando.
Si el gobierno le apuesta a la permanencia de los artesanos en los espacios, debería empezar por la credencialización y el empadronamiento para tener cierto orden y atender la demanda de las organizaciones que siguen esperando una respuesta a su demanda de espacios dignos para comercializar sus productos.