Jazmín GÓMEZ
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Lejos de mostrar compromiso para garantizar los derechos laborales de más de 600 choferes del transporte urbano, empresarios del transporte han iniciado actos de represión y hostigamiento contra aquellos que participen en las pláticas de negociación en donde exigen se garanticen sus prestaciones y derechos laborales.
Al menos 11 de quienes han encabezado las demandas fueron despedidos injustificadamente y no se les permite trabajar, denunció el dirigente del sindicato, Alejandro González Forastieri.
Este 20 de marzo un grupo de al menos 60 personas estallaron en huelga para pedir la negociación del contrato colectivo de trabajo, tal como lo anunciaron el 9 de febrero de este año, pues hasta el momento integrantes del Consejo de Administración de las empresas Choferes del Sur y Urbanos de Oaxaca, cuya presidenta es Alejandra Gómez Candiani, no han respondido a sus peticiones.
Alejandro González Forastieri, Secretario General del Sindicato de la Industria Nacional “Asociación Mexicana de Trabajadores de Autotransportes, Similares y Conexos de la República Mexicana”, explicó que 600 trabajadores adheridos a este sindicato están laborando desde hace varios años en condiciones inhumanas, con jornadas laborales superiores a 14 horas diarias pero además para evadir impuestos fueron dados de alta algunos de ellos, con salarios mínimos que exige la ley ante el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Expresó que un problema más grave aún, es que el presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCyA), Francisco Sánchez, pactó con los concesionarios fijar un porcentaje de trabajadores que tenían que laborar para evitar afectaciones al usuario, el 60%, sin embargo, aunque como sindicato le dieron una lista de trabajadores que prestarían el servicio, tomaron los nombres de las personas que más convenía a los empresarios.
Asimismo, el dirigente sindical sostuvo que algunos conductores, por temor a ser despedidos, no se presentaron a apoyar la huelga pese a que la postura es que se actualice el contrato colectivo de trabajo que beneficiaría a todos los que estén adheridos al sindicato.
“Hay amenazas contra los trabajadores, les dicen que quien pertenezca al sindicato podría ser despedido o que se atengan a las consecuencias, se están metiendo en la vida interna de los trabajadores, algo inaudito” añadió.
En entrevista por separado con algunos medios de comunicación, la empresaria Alejandra Gómez Candiani minimizó la inconformidad de los trabajadores diciendo que se trata de una minoría de gente “intolerante” que se pretende imponer ante la mayoría de conductores consientes de su responsabilidad.
“Muchos de estos trabajadores no quieren parar, otros si y son quienes están en la cerrazón y no quieren llegar a acuerdos y además hay intereses ocultos atrás de esto.
El pequeño grupo que conforma el comité de los sindicalizados están queriendo cobrar cuotas que los demás conductores no quieren pagar”, justificó.
Advirtió que la acción de huelguistas podría tener consecuencias legales porque están obligando a trabajadores a parar cuando la autoridad ya determinó que trabajara el 40%, y porque pararon desde las 6:00 horas cuando el estallamiento a huelga estaba programada para las 8:00 horas.
Es de señalar que trabajadores que pararon labores sostuvieron una mesa de diálogo con funcionarios de la Secretaría General de Gobierno y les plantearon la posibilidad de reunirse a las 10:00 horas del miércoles con reserva de confirmación.
