El Instituto Nacional de Migración (INM) pagó a la Secretaría de Marina (Semar) casi 100 millones de pesos para la manufactura y confección de 130 mil uniformes para su personal. También entregó 2.9 millones a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por el mismo concepto y 327 mil 485 pesos para la confección de 52 banderas para sus oficinas.
Los convenios de colaboración institucional se firmaron los días 23 de agosto, 31 de julio y 24 de septiembre de 2019, respectivamente, se lee en los documentos en poder de El Sol de México.
En total, la dependencia destinó ocho por ciento de su presupuesto de ese año para adquirir uniformes confeccionados por las fuerzas armadas.
A manera de comparativo, el portal de compras gubernamentales CompraNet arroja que entre los años 2010 y 2018 el órgano encargado de la política migratoria firmó cinco contratos para la adquisición de vestuario y uniformes por un monto total de 8.6 millones de pesos.
Tres contratos los firmó en 2011, uno en 2014 y otro más en 2016, todos con proveedores privados. El contrato más grande, firmado en 2011 con la empresa Adeti Seguridad Industrial S.A. de C.V., fue de 6.5 millones de pesos. Ahora, bajo la administración de Andrés Manuel López Obrador, el INM ha destinado más de quince veces esa cantidad a la Sedena y la Semar por el mismo servicio, a través de tres convenios de colaboración interinstitucional firmados en 2019.
En lo que respecta al convenio con la Marina, el Instituto Nacional de Migración pactó traspasar a la Semar la cantidad de 99 millones 521 mil 326 pesos por la manufactura y confección de 130 mil uniformes. El trabajo estuvo a cargo de la Fábrica de Vestuario y Equipo de la dependencia castrense.
El traspaso de los recursos presupuestarios se hizo del Ramo 04 Gobernación al Ramo 13 Marina, a través del Módulo de Adecuaciones Presupuestarias del Portal Aplicativo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El dinero cubrió todos los gastos de operación de la Semar, incluidos la mano de obra y el material para la fabricación, revela el instrumento jurídico firmado entre la directora de Administración del INM, Carmen Ivonne Ramírez García, y el Oficial Mayor de la Semar, almirante Enrique Genaro Padilla Ávila.
Entre las piezas confeccionadas hay camisas tipo Sheriff de manga larga y de manga corta, en colores naranja, blanco y verde; chamarras Multipurpose color verde y caqui con chaleco integrado; faldas tipo cargo color caqui; pantalones pie a tierra tácticos color caqui; pantalones rectos color caqui con franja café a los costados; playeras polo en colores morado, anaranjado y verde esmeralda, y, finalmente, sacos rectos de color verde, para personal masculino como femenino.
“Los bienes que entregue la Semar serán verificados por el INM al momento de la entrega con el personal que éste designe para tal efecto, con el objeto de validar que la entrega de los mismos se lleve a cabo con la calidad y requisitos establecidos, tanto en el presente instrumento, así como en su Anexo Técnico del citado convenio para la manufactura y confección de vestuario del personal perteneciente al INM”, se lee en el documento.
El Anexo 1A del convenio especifica con lujo de detalle las características de cada prenda en cuanto a materiales, tipo de costuras, etiquetas y escudos.
BANDERAS DE 6 MIL PESOS
Días antes de cerrar el convenio con la Marina, la dependencia a cargo de Francisco Garduño Yáñez había signado otro convenio de colaboración con la Sedena, también para la compra de vestuarios y uniformes. En este caso, el monto fue de dos millones 978 mil 810.40 pesos. A cambio, la Dirección General de Fábricas de Vestuario y Equipo del Ejército mexicano se comprometió a elaborar ocho mil prendas entre camisas, camisolas, pantalones y gorras.
Como en el caso de la Marina, el monto pactado con la Sedena incluyó la mano de obra, el material para la fabricación y cualquier otro concepto que pudiera generarse, indica el convenio firmado entre Ramírez García, por el INM, y el General de Brigada D.E.M. Agustín Radilla Suastegui, por la Defensa Nacional.
El pago se acordó de forma distinta a con la Semar. En este caso, mediante transferencia bancaria a una cuenta del Banco Nacional del Ejército, Fuerza Aérea y Armada (Banjército) cinco días después de la firma del convenio.
Un tercer convenio se firmó el 24 de septiembre de 2019, también con la Sedena. En este caso, el INM pagó al Ejército 327 mil 485 pesos para la confección de 52 banderas para colocar en sus oficinas de representación, estaciones migratorias, puntos de revisión, instalaciones en aeropuertos, puntos fronterizos y demás espacios pertenecientes a esa institución. Cada bandera costó en promedio seis mil pesos.
Del total de bienes, 50 serían banderas nacionales de oficina estampadas con asta y base de latón y dos serían banderas nacionales de oficina bordadas en hilo canutillo con leyenda, asta y base de latón.
LES PAGAN ALIMENTACIÓN Y HOSPEDAJE
El INM no sólo mantiene convenios de colaboración con las Fuerzas Armadas para la confección de sus uniformes. El 16 de junio de 2019, este órgano desconcentrado de la Secretaría de Gobernación firmó un convenio más con la Secretaría de la Defensa Nacional para proporcionar alojamiento y alimentación al personal militar que apoya las actividades de la autoridad migratoria.
El instrumento jurídico, vigente hasta septiembre de 2024, compromete a la Sedena a proporcionar hospedaje y alimento a su personal, pero al INM a pagar por ello.
“La Sedena se obliga a proporcionar los servicios de alojamiento y alimentación del personal adscrito y comisionado por el INM, conforme a la disponibilidad y capacidad para suministrar el servicio cuando lo solicite…”
“El INM cubrirá a la Sedena el monto de alojamiento y alimentación del personal adscrito y comisionados por el INM, realizando los pagos a favor de la Tesorería de la Federación, mediante el esquema de pago electrónico de derechos, productos y aprovechamientos ‘e5cinco’, empleando la clave ‘03’, Dependencia ‘Secretaría de la Defensa Nacional’…”, se lee en el convenio.
Para cada elemento de la Sedena se considera “hospedaje tipo A” que incluye uso de casillero, litera, ropa de cama, suministro de luz eléctrica, agua caliente y lavado de blancos cada tres semanas. Y “alimentación tipo A” que incluye ración caliente tres veces al día en el comedor ubicado en las instalaciones militares. Ambos conceptos implican una cuota diaria de 249 pesos por elemento.
El contrato no especifica montos, pero el INM indicó que para este concepto ya se han erogado ocho millones 967 mil 995 pesos en el año 2019, cuatro millones 346 mil 027 pesos en 2020 y dos millones 997 mil 209 pesos hasta julio de 2021. En total, 16 millones 311 mil 231 pesos.
Desde los primeros meses de su sexenio, López Obrador desplegó varios elementos militares para cuidar la frontera sur del país y así evitar los flujos de indocumentados que buscan llegar a México a través de Estados Unidos. La medida obedeció a la presión ejercida por el entonces inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump.
El martes pasado, este medio informó que la actual administración ya rompió récord en soldados desplegados, superando por mucho a los emplearon Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto durante sus gobiernos. Y Chiapas, en la frontera sur, es uno de los estados donde mayor presencia militar hay en el país.
Fuente: El Sol de México