La falta de un compromiso claro de las diferentes instancias del gobierno que encabeza Alejandro Murat para prevenir y sancionar la violencia feminicida ha hecho que en casi cinco años se acumulen 565 feminicidios en Oaxaca, en su mayoría sin un responsable sujeto a un proceso judicial y mucho menos con sentencia condenatoria.
A pesar de la Declaratoria de Alerta por violencia de género emitida en 40 municipios del estado en agosto de 2018, su impacto a favor de la seguridad de las mujeres ha sido nulo. Al 12 de octubre de este 2021 se contabilizan 350 niñas, adolescentes y mujeres, incluyendo una bebé de un año, víctimas de la máxima violación a los derechos humanos: el feminicidio.
Como integrantes de la sociedad civil, desde el Grupo de estudios sobre la mujer Rosario Castellanos reiteramos la exigencia a las autoridades para que implementen una política de prevención e impida que el gran pendiente de impartir justicia pronta y expedita a las y los deudos, siga creciendo.