Mucha gente nos llama población, grupo, etnia, pero debo decirles que somos pueblo, algunos pueblos del Quinto Sol se definen como naciones, porque tienen un fuerza de identidad increíble.
El concepto pueblo denota una asociación política de seres humanos, que ocupan un territorio, tienen una historia común, gozan de una identidad común y se rigen por normas jurídicas, políticas, sociales, económicas y culturales acordadas por el propio pueblo.
Somos pueblo porque tenemos una enorme voluntad para serlo y seguir siéndolo, así llueva, truene o relampaguee.
El pueblo del Quinto Sol, por tanto, es una asociación política de personas que habitaban el territorio de hoy llamado América antes de la colonización, que han tenido una continuidad histórica, que ocupan territorios específicos en un contexto de Estado nacional, que se diferencian por sus instituciones, normas, valores, tradiciones, principios, espiritualidad, prácticas de comunalidad, que gozan de reconocimiento por ello.
Se autodeterminan por el lugar que ocupan en la estructura política de un Estado, tienen instituciones autónomas que lo posibilitan tener un proyecto histórico específico para lograr una situación y condición de libertad, igualdad en el contexto nacional.
Su condición y situación de pueblo está legitimada por su origen, por su deseo de libertad, justicia e igualdad así como por su deseo de ser restituido políticamente con el fin de finalizar su condición de colonizado.
Pueblo del Quinto Sol es aquella asociación política que está en condición de colonizado, sus instituciones políticas, sociales, jurídicas, culturales y económicas se encuentran en condición y situación de subordinación hacia una cultura hegemónica que lo oprime y evita su libre manifestación de su ser.
La conciencia de su ser libre y de su situación define al pueblo del Quinto Sol. Cada uno de sus miembros en el país lo serán a condición de su conciencia como tales. A partir de esta conciencia los sujetos forman parte de una colectividad diferenciada y reconocida. La conciencia de identidad es en sí y para sí.
El rompimiento de colonizado es una condición necesaria para que el pueblo del Quinto Sol goce de todos los derechos que la Constitución pueda otorgar y reconocer.
Desde el pensamiento español del siglo XVI fueron reconocidos como seres con derechos de la ley natural, que reconoce a todos los hombres, como el derecho a la libertad y a la propiedad.
La Corona española reconoce derechos de los pueblos conquistados, prohibiendo la esclavitud, los trabajos forzados, deroga la perpetuidad de la encomienda y decretan la tutela por la Corona. En sus disposiciones de impuestos para los originarios cuidan que no excedan sus recursos ni comprometan la reproducción de su fuerza de trabajo. El Estado español toma bajo su mando a los pueblos de América.
Las leyes de Indias de 1680 constituyen dos regímenes políticos, la de los españoles y la de los americanos conocidos como República de indios que permite a sus pueblos mantener cierta autonomía de vida interna y de decisiones.
Podemos decir que la República de indios fue una especie de autonomía de gobierno, de territorios y tierras reconocidos por la Corona. Desde entonces somos pueblo.