Un sol rebosante se asoma desde una de las cupulas del Exconvento de Santo Domingo de Guzmán. Desde abajo el color rojizo de las sandías gigantes llama la atención de los visitantes. En el Jardín El Pañuelito desaparecieron los ambulantes y su lugar es ocupada por una exposición.
El pregón de los comerciantes de la vía pública han quedao como recuerdos. Los trajes típicos oaxaqueños y de otros estados no tapizan más esta zona turística.
Desde las primeras semanas de su administración el edil Francisco Martínez Neri aplicó el operativo para la regulación de los puestos fijos y semifijos.
Según la propia autoridad existían más de mil 480 puestos ambulantes sin ningún tipo de permisos y liderados por la organización Renacimiento y 14 de Junio.
Zonas como Santo Domingo de Guzmán hoy lucen sin puestos irregulares al igual que las calles aledañas a este recinto, sin embargo, el ambulantaje no ha dado tregua y amaga con regresar.