Integrantes de la LXV Legislatura local rindieron un homenaje postumo a Carmen Santiago Alonso, defensora de los derechos de los pueblos indígenas, quien falleció en febrero, víctima del cáncer.
“Dejarnos guiar por la huella de Carmen Santiago Alonso, representa la oportunidad de inspirarnos en la ruta de una líder comunitaria; de revivir el esfuerzo sostenido de una activista social cuya lucha por los derechos humanos, por la justicia, por el derecho a la tierra, por los recursos naturales -principalmente el agua-, por la salud, y por la causa de las mujeres, transformó la realidad de la gente”, expuso la diputada presidenta de la Mesa Directiva Mariana Benítez Tiburcio.
La defensora de derechos humanos era directora del Centro de Derechos Indígenas Flor y Canto, fue reconocida por su liderazgo y trabajo en defensa de las y los oaxaqueños.
Carmen Santiago Alonso, fue una mujer de fe inquebrantable, lo cual quedó demostrado con su carácter comprometido de misionera laica y con su firme participación en el grupo de trabajo pastoral de don Bartolomé Carrasco Briseño, Obispo Emérito de Oaxaca, donde no escatimó esfuerzos por hacer posible “el reino de Dios en la Tierra, dijo la legisladora.
“La madre Carmelita” como se le conocía, fue una persona generosa, incansable y valiente por eso hoy encuentra resguardo en la memoria colectiva de lugares de la Sierra Sur, como Santa Cruz Itundujia.
Santiago Alonso se destacó en al menos tres décadas en la defensa de los recursos naturales, principalmente del agua, en comunidades del distrito de Ocotlán y de Zimatlán.