Fernando Alcázar, director del área de estudios jurídicos de Mexicanos Primero, señaló que al menos 3.6 millones de menores se verán afectados en temas como alimentación, salud emocional y aprendizaje
Al menos 3.6 millones de menores se verán afectados por el término del Programa de Escuelas de Tiempo Completo en temas relacionados con alimentación, salud emocional, aprendizaje, así como no contar con un espacio seguro durante la pandemia que los proteja de la violencia, aseguró Fernando Alcázar, director del área de estudios jurídicos de Mexicanos Primero.
“Es verdaderamente un atropello a niños, niñas y adolescente el cierre del programa, porque es la consumación de un ataque sistemático que ha sufrido desde hace tiempo. Al Gobierno federal y a la Secretaría de Educación Pública parece no interesarles el tema de la jornada ampliada y la alimentación, por ello es ultra negativo su cancelación ya que están en riesgo 3.6 millones de menores”.
Fernando Alcázar
El experto indicó que 1.6 millones de niños, niñas y adolescentes recibían un alimento en su escuela, el cual puede ser el único en todo su día, además que se suma la falta de aprendizaje que les afecta en su desarrollo psicoemocional. “En el encierro los niños sufrieron varios retrocesos y el regreso a la escuela es lo mejor para ellos, ya que salían de sus casas a convivir con más personas afines a ellos”, indicó.
Además, dijo que las escuelas eran un espacio seguro, sobre todo para las niñas, ya que eran violentadas dentro de su hogar por familiares o amigos; al igual para padres que tendrán que reorientar sus labores y maestros debido a que era una entrada más de recursos.
Este martes, la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez, confirmó la eliminación del Programa de Escuelas de Tiempo Completo en México, al considerar que no eran prioritarias en el programa La Escuela es Nuestra, por lo que se decidió reorientar el presupuesto que tenían.
Por su parte, Alma Maldonado, investigadora del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN (Cinvestav), aseguró que el mensaje de las autoridades federales es que no quieren reducir las brechas de desigualdad, que era uno de los objetivos fundamentales del programa.
“Lo que hicieron las autoridades es cumplir lo que querían desde hace años, sólo se oficializa, pero me parece una ceguera total eliminar este programa que funcionaba, ayudaba a estudiantes que más lo necesitaban y que pasó todas las evaluaciones a las que lo auditaron”.
Alma Maldonado
La especialista aseveró que el programa tuvo mejores resultados, incluso que las becas que reparten a nivel nacional, además que quitan convivencia permanente, desarrollo integral y aprendizaje, lo que es un fuerte golpe a la educación a nivel nacional.
“Hay que verificar si los programas federales ayudan a los estudiantes o sólo es clientelismo político, porque el mensaje es que no se quiere ayudar a los niños, niñas y adolescentes que realmente desean aprender”.
Fuente: La Razón