En en marco el Día Mundial de la Libertad de Prensa, la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) aseguró que durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, “México se mantiene como uno de los países más peligrosos y mortíferos del mundo para los periodistas”.
De acuerdo con el organismo internacional, el jefe del Ejecutivo mexicano no sólo ha sido omiso en emprender las reformas necesarias en el país para frenar la espiral de violencia contra la prensa, sino que desde su posición ha impulsado el odio, el encono y la polarización contra comunicadores que le causan incomodidad.
En su informe sobre país, la organización publicó este martes su nueva edición de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, en la que México se ubicó en el lugar 127, de un total de 180, y obtuvo 47.5 puntos, lo que representa que en el hay “una situación difícil para los periodistas”.
La vigésima edición de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa realizada por RSF revela una doble polarización, amplificada por el caos informativo: la polarización mediática, que crea fracturas dentro de los países, y la polarización de los Estados, a escala internacional.
El año pasado México obtuvo 54.29 puntos, lo que significa que descendió 5.7 puntos, sin embargo, se sigue ubicando como uno de los países más peligrosos para periodistas en el mundo.
Reporteras Sin Fronteras destacó que el presidente López Obrador y otras figuras del Estado “han adoptado una retórica tan violenta como estigmatizante contra los periodistas, a los que acusa regularmente de promover a la oposición”.
Señaló que el gobierno federal expone cada miércoles su sección ¿Quién es quién en las mentiras de la semana?, “un espacio más en el que se desacredita a la prensa”.
“En sus más de tres años de mandato, el presidente ha criticado a los periodistas por su falta de profesionalidad y ha calificado a la prensa mexicana de “parcial”, “injusta”, y de “desecho del periodismo”, acusó la organización.
Además, en México la convivencia entre las autoridades y el crimen organizado constituye una grave amenaza para los periodistas, quienes padecen amenazas, “cuando no son simple y llanamente asesinados”, aseguró Reporteros Sin Fronteras.
Según el registro de Reporteros Sin Fronteras, en México han sido asesinados cuatro periodistas en lo que va del año. Sin embargo, para la organización Artículo 19 suman ocho homicidios.
Aunado a los asesinatos se suman agresiones y amenazas contra la prensa, el pasado 29 de abril Esteban Cruz Rosas, director de la radio indígena de Ocumicho, fue secuestrado por un comando armado en Michoacán.
La Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, que evalúa las condiciones en las que se ejerce el periodismo en 180 países y territorios del mundo, pone de manifiesto, en su edición de 2022, los efectos desastrosos del caos informativo, creado por un espacio digital globalizado y sin regular, que favorece las informaciones falsas y la propaganda. En las sociedades democráticas, el desarrollo de medios de opinión al estilo de Fox News y la generalización de los circuitos de la desinformación, impulsada por las redes sociales, están provocando un aumento de las fracturas sociales. En el plano internacional, la asimetría que existe entre, por una parte, sociedades abiertas y, por otra, regímenes despóticos que controlan a sus medios y sus plataformas, mientras libran guerras de propaganda, debilita a las democracias. En ambos niveles, esta doble polarización es un factor de intensificación de las tensiones.
Con motivo de la vigésima edición de la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa, RSF ha evolucionado su metodología, trabajando con un comité de expertos* procedentes del mundo académico y mediático.
Este trabajo ha permitido definir la libertad de prensa como “la posibilidad efectiva para los periodistas, como individuos y como colectivo, de seleccionar, producir y difundir informaciones en aras del interés general, independientemente de las interferencias políticas, económicas, legales y sociales, y sin amenazas para su seguridad física y mental”. El resultado son cinco nuevos indicadores que estructuran la Clasificación y que dan una visión de la libertad de prensa con toda su complejidad: contexto político, marco legal, contexto económico, contexto sociocultural y seguridad.
En los 180 países clasificados por RSF, estos indicadores se evalúan sobre la base de un listado cuantitativo de los ataques cometidos contra periodistas y medios, así como del estudio cualitativo de las respuestas de centenares de expertos en libertad de prensa seleccionados por RSF (periodistas, académicos, defensores de los derechos humanos…) a 123 preguntas. El cuestionario ha sido actualizado con el fin de reflejar mejor determinados factores, especialmente los relativos a la digitalización de los medios.
Esta evolución metodológica hace que las comparaciones en posición y en puntuación entre 2021 y 2022 deban manejarse con precaución. La recopilación de datos se detuvo a finales de enero de 2022, pero se han realizado reactualizaciones entre enero y marzo de 2022, para aquellos territorios en los que la situación había cambiado drásticamente (Rusia, Ucrania y Mali).