Al conmemorar 5 años del sismo 7 de septiembre que afectó principalmente a Juchitán de Zaragoza, el Secretario de la Contraloría, José Ángel Díaz Navarro, aseguró que en el mes patrio se debe recordar que el espíritu de Oaxaca es indomable ante la adversidad; que Oaxaca está de pie y camina con la frente en alto.
Durante la ceremonia de izamiento de bandera, indicó que el terremoto de 8.2 grados, con epicentro en el Istmo de Tehuantepec, dejó 79 pérdidas humanas e incalculables daños materiales, principalmente en la ciudad de Juchitán de Zaragoza y municipios aledaños.
Días después, el 19 de septiembre, pegó otro sismo de gran magnitud, cuando aún se vivía la zozobra y el dolor a flor de piel por las cuantiosas afectaciones en decenas de municipios.
“Estos sismos han representado una dura prueba para el pueblo y el gobierno de Oaxaca, con 41 municipios afectados 180 mil oaxaqueños damnificados, más de 64 mil viviendas derruidas o dañadas, casi 4 mil escuelas golpeadas, 43 clínicas y hospitales con daños o como el Macedonio Benítez de Juchitán, totalmente destruidos”, indicó.
Aseguró que fueron 10 palacios municipales afectados, 25 monumentos históricos, 282 templos católicos, 12 museos y centros culturales, así como 7 zonas arqueológicas con daño o destrucción.
Indicó que el mejor homenaje a los héroes de la patria es el trabajo y la hermandad para apoyar en las labores de rescate y reconstrucción, ademas es imprescindible que los sectores productivos, las maestras y maestros, los estudiantes, las mujeres, las universidades y a todos los que integran la gran familia oaxaqueña, sigan haciendo de la unión su fortaleza.