Sin aclarar de manera puntual el polémico asunto del pozo “fantasma” que no aparece en los terrenos de sembradío de San Antonio de la Cal, la ex directora de los Servicios de Alcantarillado y Agua Potable de Oaxaca (SAPAO), Laura Vignon Carreño reconoció que hubo una “reposición” de la obra debido a los problemas sociales que enfrentaba en 2020 autoridades de San Antonio de la Cal y “supone” que en el expediente técnico debe estar el documento de aviso.
En su derecho de réplica, la exfuncionaria pública quien supone que dentro de los expedientes técnicos debe existir el documento en donde informan sobre el cambio del lugar de dicha obra, la cual se excavó a un lado del pozo 17 que ya contaba con línea de conducción daba 10 litros de agua por segundo y que según ella ya no era viable porque ya no daba el suficiente líquido y el que repusieron da 14 litros por segundo.
Es importante destacar que en este espacio se cuenta con todo el expediente técnico completo de la obra que está a disposición de la opinión pública, y en ellos no existe ningún documento de aviso del cambio de dicha obra, que insistimos el debate no es si se hizo o no, el tema es que violentaron un contrato original y la manera en que hicieron las cosas no fue la correcta.
Y le preguntamos a la exfuncionaria pública si ella tenía el expediente y esto nos respondió: “es un documento interno que se maneja en la dirección técnica en donde derivado de los temas sociales, no se está haciendo mal manejo del recurso, sino lo que se busca es precisamente que el recurso que ya se tiene autorizado se pueda aplicar y aprovechar en el objetivo final que es tener una fuente de suministro de agua”.
Es un documento que se genera dentro del expediente técnico, ok, ¿usted tiene el expediente técnico?, le insistimos:
“Yo estoy abierta a que se haga la revisión, a que se pueda en su momento analizar que dentro del expediente existe como tal. Que fue la problemática social la que nos llevó a realizar estos cambios en los proyectos para poder entregar resultados”.
“Era muy importante que se aplicara el recurso y que no se cancelara, es algo que se está buscando para beneficio de la ciudadanía y que no se puede uno dar el lujo de una cancelación y de iniciar un nuevo procedimiento, dentro de las modificaciones en todas las fuentes de financiamiento que se manejan existe esa posibilidad de generar los cambios de un proyecto”.
Aquí también involucró a los exdiputados locales que en su momento integraron la Comisión Permanente de Agua de la 64 Legislatura local, Griselda Sosa, César Morales Niño, Yarith Tannos y Othón Cuevas (DEP), quienes en 2020 realizaron los recorridos con ella y dieron su aval, no sin antes hacer el cuestionamiento de la misma obra.
Sin embargo, en el congreso local no existe ningún acta que de referencia a esos hechos. Laura Vignon solo mostró fotografías de la red social Facebook.
Pero insiste en que las y los legisladores estuvieron trabajando en frecuentes reuniones, analizaron los proyectos, hicieron los cuestionamientos, los recorridos de manera física para dar certeza de los trabajos que se estaban realizando y que en el momento del recorrido se encontraba la maquinaria trabajando en la perforación que actualmente se encuentra en funcionamiento.
Se pueden ver los vestigios del pozo 17 que dejó de producir por abatimiento y que no se ubica en la dirección original que establece el contrato, en el terreno de sembradío, como se planteó en la pasada columna.
Ahora bien.
Laura Vignon comentó que ella tuvo que ausentarse por razones de salud de SAPAO y no estuvo en la entrega recepción cuando se hizo el cambio de director general del organismo, dejó a un encargado de nombre Miguel Ángel Morales quien hoy atraviesa por una grave enfermedad, quizás como buscando una excusa, solo que ese no es tampoco el meollo del asunto, el tema si nos vamos más a fondo es que tampoco acreditan la posesión del terreno, no pidieron permiso de perforación a la Conagua así se tratara de una reposición, se debió hacer.
En este espacio también contamos con copia del pago del finiquito de diciembre de 2020 que aquí les publicamos, porque no es una obra de 2021 ni 2022, aunque ésta apenas la hayan entregado el pasado mes de julio de manera informal, lo que es peor pagaron y comprobaron una obra no ejecutada por la constructora Luanda Construcciones S.A. de C.V., en lugar de exigirle a la empresa el pago de vicios ocultos por incumplimiento.
En el reporte de ficha de transferencia de Banorte de fecha 12 de diciembre de 2020, se puede corroborar que Laura Vignon Carreño siendo directora de SAPAO pagó el finiquito de dicha obra a la empresa Luanda Construcciones por $2,812,774.16 pesos, ¿por qué la obra de reposición del pozo 17 fue entregada apenas en julio pasado?
A la pregunta de porqué no revisaron que la empresa contaba con diversas irregularidades y la dejaron pasar, la entrevistada respondió: “dentro de la normatividad vienen definidos los requisitos que se deben de presentar para que se lleven a cabo los procesos de contratación establecida en apego a la ley y aquí quiero señalar que nosotros como organismo nos avocamos a que cumplan con esos requisitos y cuando ellos cumplen es cuando se lleva a cabo ese procedimiento”.
¿Pero esa empresa no cumplía con los requisitos legales, ni siquiera del SAT?, se le insistió, pero su respuesta fue vaga nuevamente:
“Nosotros como organismo somos los primeros inmediatos para poder revisar los requisitos que las empresas que vayan a participar estén cumpliendo. Cuando una empresa participa se le pide el listado de requisitos, te avocas a lo que te están solicitando y con eso se da el cumplimiento, ya la empresa tendrá que cumplir con las observaciones que en su momento le llegaran a generar por algún incumplimiento o por el comportamiento que ellos tengan”.
“Hasta este momento el trabajo que he desempeñado lo he hecho bien, primero se que conozco, que tengo la capacidad, el profesionalismo, la experiencia, pero sobre todo el compromiso con la ciudadanía oaxaqueña, que no tengan la menor duda que donde he estado siempre he hecho un buen manejo de los recursos, soy una mujer de trabajo y sobre todo de resultados”, cerró la exfuncionaria pública.
También les compartimos amable audiencia los planos originales de la obra firmada y sellada por SAPAO, así como la macro y micro geolocalización original y todo apunta hacia los terrenos de sembradío de San Antonio de la Cal, ni siquiera eso cambiaron.
Y ya para cerrar este polémico asunto del pozo “fantasma”, es importante comentar sobre las erróneas declaraciones del inexperto director de SAPAO, Reynaldo Hernández que intentó desmentir tratando de ayudar a su antecesora Laura Vignon Carreño en un procedimiento viciado donde se señalaron anomalías graves que concluyeron en la simulación de un proceso.
La obra está, sí, pero no donde debe de estar como se autorizó con base en el decreto 809 y si para el abogado litigante y “especialista en auditoría”, Reynaldo Hernández el fin justifica los medios, entonces dónde quedó aquello de que las y los funcionarios solo pueden hacer lo que la ley les permite.
No señor Hernández, el fin no justifica los medios, para eso están los principios constitucionales del Gasto Público y como parece que se le olvidaron, aquí le damos una repasadita: honradez, transparencia, economía, eficacia y eficiencia.
Le recordamos también que la obra cuestionada es del 2020, licitadas y pagadas por su antecesora, quizás lo que trató de hacer con su declaración fue pagar un intercambio de favores por su paso en la Comisión Estatal del Agua y aplicó el famoso dicho “una mano lava la otra y las dos lavan la cara”.
En fin. La mejor opinión la tienen ustedes amables ciberlectores.
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