Al acercarse el relevo gubernamental en Oaxaca y luego de haberse iniciado las reuniones de la transición para la entrega de la administración estatal al nuevo gobierno que encabezará Salomón Jara Cruz, se sabe que una de las peticiones del equipo de la #4T al gobernador Alejandro Murat Hinojosa es que quieren el zócalo y los corredores del Palacio de Gobierno “limpios”, sin ambulantes.
Por supuesto la solicitud les puso los pelos de punta a varios funcionarios muratistas, entre ellos el secretario general de gobierno, Francisco García López; la secretaria de seguridad pública, Dalia Baños Noyola; el mismo Manuel Vera Salinas del secretariado ejecutivo de seguridad y a la coordinadora de derechos humanos, Norma Reyes Terán, por lo que una medida de esta naturaleza les implica.
Jara Cruz, quien ha dicho que no utilizará la fuerza pública en su gobierno, presiona a través de Jesús Romero López para que el corazón de la capital oaxaqueña y el Palacio de Gobierno, principal símbolo del poder en Oaxaca, queden despejados.
Quiere recibir un zócalo libre de ambulantes, que las puertas de Palacio de Gobierno se abran, pero él no se echaría una responsabilidad de esa naturaleza.
Veamos a lo que se enfrentarían en caso de que Murat Hinojosa decidiera implementar una estrategia de desalojo por supuesto con la venia de los mandos federales.
De entrada, los triquis que están ahí por medidas cautelares, pues ya no las tienen, ya vencieron, no hay argumentos ni justificación para que sigan viviendo y comercializando sus productos en los corredores de Palacio de Gobierno, y eso lo sabe la federación, el propio subsecretario de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.
Ahí algunas organizaciones y movimientos sociales se “plantaron” como protesta, que ha degenerado en la comercialización de esas áreas y que ha causado un severo daño a la arquitectura y a los propios comercios establecidos que están alrededor y esto viene desde el gobierno de Gabino Cué Monteagudo.
En el zócalo están instalados 143 puestos fijos y ambulantes, los cuales operan de manera irregular con la participación de aproximadamente 300 personas.
¿Quiénes son estas organizaciones sociales?
1.- Grupos de la etnia triqui bajo las siglas del MULT y MULTI
2.-Corriente del Pueblo “Sol Rojo”.
3.-Unión de Artesanos y Comerciantes Oaxaqueños en Lucha (UACOL)
4.-Desplazados de Huazatlán del Río
Vamos identificando quiénes son las y los principales operadores de esas organizaciones y cómo están distribuidos en el zócalo y el Palacio de Gobierno.
En el Portal de Mercaderes se ubican 15 puestos ambulantes de la corriente del Pueblo “Sol Rojo”, dirigidos por Javier Aluz Mancera, alias Chivo y Yolanda Ruiz Cruz, cuyos integrantes son 5 hombres y 15 mujeres. En la calle Flores Magón hay 6 puestos atendidos por 3 varones, 5 mujeres y 3 menores de edad dirigidos por Lorena Merino Martínez.
En la Alameda de León son 68 puestos (20 hombres, 45 mujeres y 15 menores), aunque aquí no se identifica a sus dirigentes, mientras que al interior del portal del Palacio de Gobierno son 24 puestos (15 hombres, 20 mujeres y 9 menores) dirigidos por Reyna Flores Martínez, Francisca López Conde y Jesús Martínez.
En la parte exterior del portal de Palacio hay 9 puestos pertenecientes a la corriente del Pueblo Sol Rojo liderados por Javier Aluz Mancera alias Chivo y Yolanda Ruiz Cruz (20 hombres, 15 mujeres y 8 menores).
También están 8 del UACOL cuyos líderes son Adán Mejía López y Lenin Natanael Pérez Gómez con 15 varones y 10 mujeres, y el grupo de desplazados de Huazatlán del Río con 1 puesto y son 20 integrantes.
Y en el portal Las Flores se ubican 9 puestos (15 varones, 13 mujeres y 10 menores) liderados por Sergio Zepeda González y José Víctor Rodríguez. Y 3 puestos del UACOL con 10 hombres, 15 mujeres y 4 menores, dirigidos por Adán Mejía López y Lenin Natanael Pérez Gómez.
Esta es la distribución de los grupos de protesta ubicados en el corazón de la capital oaxaqueña que convirtieron ese espacio histórico en su “modus operandi” de comercialización y venta hasta de productos “piratas” y que en estos seis años de la actual administración nadie hizo caso para buscar alternativas de solución que permitiera el retiro de los puestos ambulantes.
Hoy a petición del nuevo gobierno de la “Primavera Oaxaqueña” de retirarlos, la administración de Murat Hinojosa se encuentra en un verdadero problemón, porque, de entrada, deberán agotar el diálogo para tratar de convencer por las “buenas” a los líderes para que se quiten y tener el espacio para reubicarlos de manera definitiva.
Se sabe que salvo los triquis que son los más renuentes, los demás grupos ya habrían aceptado retirarse y ser reubicados.
Intervendrán los tres órdenes de gobierno, la federación, gobierno del estado y el municipio de Oaxaca de Juárez, por supuesto la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, la Coordinación para la Atención de los Derechos Humanos, en un último intento de convencer a los triquis para que desalojen los corredores de Palacio de Gobierno.
Todo ello con miras al relevo gubernamental el próximo 1 de diciembre, donde por cierto se prevé que Jara Cruz realice un magno evento en el Auditorio Guelaguetza, pero antes su antecesor Murat Hinojosa rendiría su 6º Informe de Gobierno en el mismo lugar el próximo 15 de noviembre.
Y las preguntas que quedan en el aire, por el momento: ¿desalojarán a los triquis?; ¿limpiarán el corazón de la capital oaxaqueña donde hay 143 puestos ambulantes?
Ya lo veremos.
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