-Entre porras, nieves, “sonrisas” y un fuereño “yupi”, llega el nuevo gabinete de Salomón Jara
-La prensa oaxaqueña nuevamente fue relegada, no les permitieron ni siquiera tomar fotos de cerca, los mandaron al corralón
Barrer de “arriba hacia abajo todos los privilegios” lanzó la advertencia Salomón Jara a su gabinete este día, como el famoso spot proyectado al inicio de su evento, que resonó en todas las paredes del centro de convenciones “limpiar muy bien y que no haya cucarachas y ratones”.
Con quiniela en mano, invitados, reporteros y aspirantes a un empleo confirmaron por fin si sus amistades, compadres o conocidos, habían logrado un cargo, dentro del Gabinete del gobernador electo Salomón Jara Cruz, luego de darse a conocer 12 de 19 nombramientos.
Estrenándose en la organización, las y los integrantes del equipo de “staff”, trataron de hacer su mejor esfuerzo, aunque por momentos se hacían largas filas de invitados y medios de comunicación que llegaron media hora antes al evento y deseaban entrar.
“De 10 en 10, por favor”, gritaba una de las jóvenes del equipo organizador que intentaba -sin lograrlo- acomodar a las y los reporteros, que ingresaban en una puerta lateral del Centro Cultural y de Convenciones, donde se hacía una separación para quienes eran invitados y los “medios”.
No faltó personal de los organizadores, quienes confundidos llegaron a poner el desorden dando paso a un grupo de reporteros que curiosos tomaban fotos y se adelantaban a lo que parecía una fila, lo que ocasionó la molestia porque la indicación era que solo “formados” entrarían conforme llegaron.
Mientras todos esperaban al Gobernador electo, Salomón Jara -no faltó la nieve tradicional y los vasitos con tejate para hacer amena la espera, calmar los calores y los ánimos- anunciaron entonces por micrófono el arribo discreto de la nueva primera dama, Irma Bolaños Quijano, esposa del mandatario .
Unos 15 minutos antes de comenzar el acto, que dio inicio en punto de las 12 del día, las y los invitados iban llegando a tomar sus lugares, sin embargo lo que predominaba -según los asistentes- era el aire istmeño, desde “guardias” de seguridad y personal de organización, portando guayaberas blancas, que los diferenciaban del resto.
Decían que esto era porque dos de los hombres fuertes de este nuevo gobierno tienen raíces o ascendencia de esa región: de Juchitán, por parte de su mamá, Jesús Romero López -quien será Secretario de Gobierno- y de San Blas Atempa, Antonino Morales Toledo -Secretario de Administración-.
Presidentes municipales de Morena, diputados locales y uno que otro líder social como el controvertido Flavio Sosa Villavicencio, se hicieron presentes, paseaban, levantaban la mano, saludaban, se hacían notar, dependiendo de la cercanía: apretón de manos, palmadas en la espalda o abrazo efusivo y el clásico reconocimiento de familiaridad: “hermano querido”.
A las 12:01 el gobernador electo, Salomón Jara ya anunciaba los primeros nombramientos de quienes a partir del 1 de diciembre “trabajarán incansablemente para construir un estado de derecho, de justicia e igualdad para todas y todos”, advertía.
Al tiempo de lanzar la instrucción al nuevo gabinete: “si encuentran cucarachas y ratones, hay que limpiar”, en su compromiso de pasar la barredora contra la corrupción.
Y en el “aplausómetro”, el más ovacionado -al borde de los gritos y las porras- fue en primer lugar Antonino Morales Toledo -próximo secretario de Administración- seguido de Geovany Vásquez Sagrero -Consejero Jurídico- y Laura Estrada -nueva secretaria de Bienestar, Tequio e Inclusión, quienes además se ganaron junto con Jesús Romero -Secretario de Gobierno- y Saymi Pineda -Secretaria de Turismo- el título de “sonrisas”.
Los menos vitoreados, fueron Raúl Ruíz -designado Secretario de Desarrollo Económico-; Víctor López Leyva – próximo secretario de Desarrollo Agroalimentario, lo que antes era Sedapa- y José Antonio Rueda Márquez -quien estará a cargo de la Jefatura de Gabinete-, y será comentaban el vicegobernador.
También hubo caras asustadas, al menos sus expresiones las delataron, tal vez por el paquete que tendrán encima: Delfina Elizabeth Guzmán Díaz, quien no sólo estrenará nueva secretaría, la de Educación Pública sino que además llevará la complicada relación -a través del IEEPO- con los 83 mil integrantes del magisterio además de otros 53 mil basificados que se agregaron apenas ayer.
El propio gobernador electo tuvo que aclarar que “para evitar cualquier confusión en la información, el IEEPO no sufre ningún cambio y vamos a seguir teniendo la misma normatividad y gente y trabajaremos de la mano para ejercer otras facultades que permitan fortalecer con el acompañamiento y participación del magisterio”.
En la misma línea de caras de susto, se observó el rostro de Eliza Zepeda Lagunas, a quien le asignarán la Secretaría de las Mujeres, quien no sólo enfrentará la relevante tarea de incorporar la perspectiva de género, promoviendo la igualdad sino además poniendo en marcha acciones para prevenir y erradicar la violencia de género -con una elevada cifra de feminicidios y una reciente reforma que eliminó la paridad en la elección de mujeres en municipios que se rigen por los “usos y costumbres”.
Cabe recordar que fueron sus propios compañeros de la bancada morenista en la 65 Legislatura local, quienes con su aplanadora aprobaron dicha reforma considerada por los grupos feministas locales y nacionales, como una aberración y retroceso a los derechos de las mujeres en Oaxaca.
Y es que este sexenio que está por terminar, suman 708 asesinatos de mujeres, 126 solo en lo que va del año, de acuerdo al seguimiento hemerográfico del Centro de Documentación del grupo de estudios sobre la mujer “Rosario Castellanos”.
Un incremento significativo, si se toma en cuenta que en el sexenio de Ulises Ruíz se registraron 283, cifra que se elevó a 527 de Gabino Cué pero que se disparó en la actual administración de Alejandro Murat Hinojosa.
Siguiendo con la pasarela también se reflejaron rostros serios, como si no hubiera caído bien el cargo o se hubieran tenido otras expectativas, como fue el caso de la diputada con licencia Laura Estrada Mauro, quien en pasillos se rumoraba había pedido la Secretaría de Salud o bien la Secretaría de Administración, pero “solo” le tocó la de Bienestar, con todos los programas sociales que eso implica.
El malestar de la ex diputada, ¿ será porque la mayoría de los programas “clientelares”, se los llevó el gobierno federal morenista desde hace 4 años: becas, adultos mayores, ayuda a mujeres etc?.
Hablando de malas caras, ni bien terminaba de hablar el gobernado electo, cuando se vio salir muy apresurado, destemplado y hasta “molesto” al próximo Secretario de Gobierno, Jesús Romero, ¿le dieron alguna mala noticia, como es el hecho de que su compañero de Gabinete José Antonio Rueda Márquez, absorberá muchas de las funciones de la antes Segego?.
De acuerdo a los últimos acuerdos, trascendió que la nueva Jefatura del Gabinete tendrá más facultades y sólo dejará a la ex segego, como mera oficialía de partes, “recepcionando marchas, plantones y bloqueos”.
Van a presentar la reforma al Congreso del Estado, para ver cómo queda la Secretaría de Gobierno, que le quitaron la de General, es decir, ¿pasará a soldado razo?
Y hablando de Rueda Márquez -Jefe de Gabinete-, tímidamente saludaba a la multitud reunida, posiblemente porque es el nuevo “yupi”, no nació en Oaxaca y de acuerdo a lo anunciado en campaña por el hoy mandatario electo, oriundo de San Melchor Betaza, “orgullosamente indígena”, se comprometió a que no habría “fuereños” en su gabinete.
Aunque Rueda Márquez, comentaban, lleva tres años viviendo en Oaxaca y eso le permite tener un cargo público, políticamente el gobernador electo habría incumplido su promesa de no “contratar” a políticos no nacidos en territorio oaxaqueño.
Terminado el acto y con el anuncio de que habrá segunda parte el próximo domingo cuando se den a conocer el resto de integrantes del gabinete legal, se impidió el acceso a los medios de comunicación por lo menos a tomar mejores fotos, pues sacaron por una salida de escape a las y los recién nombrados secretarios y sus invitados.
La prensa oaxaqueña sigue siendo relegada.