Luego de que en el evento del Inter-Laboral Deportivo y Cultural del Sindicato Único de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (SutCobao), realizado en la capital oaxaqueña donde les dieron comida echada a perder, la base trabajadora de esa institución educativa fijó un posicionamiento en asamblea, en donde exigen cuentas a su dirigente Rufino Olea González y a la propia directora general Verónica Hernández González.
No se midieron.
Dentro de los acuerdos que plasman en su manifiesto dirigido al gobernador Salomón Jara Cruz, está la exigencia de una disculpa pública por parte de la doctora Verónica Hernández y del líder del sindicato Olea González, así como una explicación de lo ocurrido.
A la petición también se suma la destitución de los servidores públicos que resulten responsables de la mala organización y fallido evento donde se registraron hechos de violencia y arrojó personas lesionadas.
Vergonzoso el papel tanto de los organizadores como de algunos trabajadores que se liaron a golpes y sillazos con los meseros, después de que se alcoholizaron brutalmente y los directivos le pidieran a cambio que olvidaran el bochornoso incidente de la comida descompuesta.
¡Les vamos a rifar un coche!, les dijeron para calmarlos.
En otros tiempos, ya habrían destituido a la misma directora y los de base a su líder, la falla fue muy grave, cuando se supone que son trabajadores que ofrecen calidad educativa en una institución como es el Colegio de Bachilleres, pero lo único que demostraron es que no tienen ni tantita educación.
Dentro del pliego petitorio signado por la base trabajadora, llámese delegados sindicales del personal que labora en oficinas centrales exigen una auditoria específica a los Recursos Financieros ejercidos por la presente administración y al SutCobao por los últimos eventos realizados, a cuotas sindicales y a la caja de ahorro por los últimos cinco años.
También dejaron claro que su protesta es en pleno ejercicio de su derecho a la libertad de expresión, por lo tanto, no debe ser motivo de represalias personales o laborales para ninguno de los trabajadores de base participantes.
Y finalmente piden respeto y trato digno a todos los trabajadores en sus áreas de trabajo y eventos de convivencia, luego de los hechos suscitados en su evento de Inter-Laboral en donde la irresponsabilidad, falta de organización, trato deshonroso fue notorio, dejando de manifiesto la falta de compromiso e interés de la dirigencia sindical y los que llevan el destino patronal del Cobao.
Dentro de las fallas señalan que no hubo suficiente comida para los más de 2 mil trabajadores que asistieron al evento, amén de que estaba echada a perder, en muy mal estado, falló la logística y no hubo servicio médico para los contingentes que participaron en la calenda, no hubo orden.
La ceremonia de inauguración no pudo realizarse adecuadamente debido a la falta de módulos para proteger a las y los trabajadores de la inminente lluvia, lo que derivó en que quienes asistieron optaran por retirarse.
Terrible este tema del Cobao y sí es muy importante que se abra una investigación y se finquen responsabilidades a quienes pusieron en riesgo a las y los trabajadores por darles comida descompuesta que puso en grave riesgo su salud.
Pero también la base trabajadora del Cobao ya debe tomar decisiones para destituir a su líder Rufino Olea, que pretende seguir en el cargo a perpetuidad y jamás ha rendido cuentas, se ha manejado con total impunidad bajo el cobijo de gobiernos priistas y ahora de la #4T
De mal en peor en el sistema educativo del Colegio de Bachilleres de Oaxaca.
DE COLOFÓN:
Pasando a otro tema. La disputa por el cascajo de la dirigencia estatal del PRI ha subido de tono, se ha vuelto más intensa.
El verdadero pleito que traen los dos grupos que se disputan la dirigencia estatal, los avilistas y los muratistas, primero son por las decisiones de las candidaturas pluris para la nueva 66 Legislatura del Estado.
Segundo, el manejo de las prerrogativas que alcanzan los casi $41 millones de pesos anuales, más el monto en actividades específicas que suman $1,185,926.53 pesos. Nada despreciables.
Y aunque está previsto que sea después de las elecciones del Estado de México y Coahuila cuando se realicen los cambios, el grupo muratista presiona para que así sea, el actual líder del PRI, Javier Villacaña Jiménez ha dicho que salvo que él renuncie o que se vayan a una elección en el Consejo Estatal, pero ahí dice que ellos, su grupo, tienen mayoría, vendría el relevo.
Es decir, quieren hacer la misma jugada que hizo el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas para quedarse más tiempo, solo que el priismo de Oaxaca no está en ese nivel. No es lo mismo.
Esto quiere decir que no le dejarían el camino fácil a la posible imposición que pretenden manejar desde Polanco, donde le han dorado la píldora a Francisco Ángel Villarreal, Francisco García López, Germán Espinosa Santibáñez y Miriam Liborio.
¿Se avizora rompimiento?, a ninguno de los dos grupos les conviene más fracturas, si de por sí ya casi los desaparecen del mapa electoral.
En el PRI no hay futuro y eso deben entenderlo muy bien las y los priistas que se han negado rotundamente a cambiar las cosas, ahí todo sigue igual, las mismas prácticas, no hay renovación ni han preparado nuevos cuadros, huelen a rancio.
Igual y en ese estire y afloje quien asuma la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI, pueda ser el mismo Alejandro Avilés Álvarez, porque de ser así, Villacaña se quedaría quieto, es de su mismo grupo, aunque el de Polanco no los quiere.
El grupo avilista, en donde están los Villacaña, Marco Cuevas, Jorge Toledo, etcétera, también traen pláticas con el exgobernador Alejandro Murat Hinojosa precisamente para la recomposición del PRI en Oaxaca, pero no quieren tratar nada con el de Polanco, que se sabe está molesto porque el grupo de AAA hizo algunos cambios en el CDE del tricolor sin consultárselo.
Entre bandidos te veas.
Para nadie es un secreto también que tanto Marco Cuevas como Jorge Toledo traen pacto con el actual secretario de gobierno, Jesús Romero López, es decir, desde la SEGO fraguan el divisionismo del PRI, y lo hacen a través del grupo avilista.
Y por supuesto le atizan al fuego para que haya más fracturas, lo malo es que la misma gente de Avilés Álvarez se han prestado para hacer juego sucio, aunque con ello quien carga todos los negativos de los “traidores” pues es el mismo triple AAA, quien cada vez observa más lejana la posibilidad de ser candidato a senador.
Tanto Marco Cuevas como Jorge Toledo son los súper “asesores” de Chucho Romero, ahora entendemos por qué tiene tantos problemas con el equivocado manejo de la política interna, si tiene incrustados a priistas del pasado que le hicieron tanto daño a Oaxaca.
¿Lo sabe Salomón Jara?
Javier Villacaña ya advirtió que se va a poner bueno el asunto. Claro, por supuesto, si ya empezaron a tirarse lodo en redes sociales y en WhatsApp, utilizando cuentas falsas, ya se los habíamos dicho, empezó la guerra de estiércol, todos contra todos.
Ahora bien.
Se sabe que dentro de las posibles negociaciones que trae el actual líder del tricolor para poder dejar la dirigencia estatal es que vaya su hija Karla Villacaña en el primer lugar de la lista pluri a la diputación local.
Faltaba más, si a la hija de Eviel Pérez Magaña (Gabriela Pérez) le regalaron un espacio sin ganárselo, por qué a la hija del dirigente estatal del PRI la van a hacer menos, ese es el relevo generacional, por eso no crecen.
Hagan sus apuestas, a ver qué grupo priista se queda con el cascarón del PRI, ¿los avilistas o los muratistas?
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