Un hecho ha causado que Zapopan, Jalisco, ocupe los medios de comunicación, pues aunque la desaparición de personas es una trágica constante en México, en el caso ocurrido en la Zona Metropolitan de Guadalajara llama la atención que hay algo que conecta a los cinco jóvenes buscados por sus familiares: todos trabajaban en el mismo call center, ubicado en la calle Víctor Hugo número 158 esquina Goethe de la colonia Jardines Vallarta.
Dos de ellos son hermanos, Itzel Abigail y Carlos David Valladolid Hernández de 27 y 23 años respectivamente, su desaparición está fechada el pasado 22 de mayo; al igual que la de Arturo Robles Corona de 30 años. También se busca a Carlos Benjamín García Cuevas de 31 años, quien desapareció el 20 de mayo. El último nombre en sumarse a la lista fue el de Jesús Alfredo Salazar Ventura de 37 años de edad.
Según las publicaciones realizadas en redes sociales por sus conocidos, los cinco además de trabajar en el mismo sitio, también son amigos. Aunque al momento la Fiscalía General del Estado (FGE) de Jalisco no ha establecido si existe relación entre las desapariciones o si se trata de hechos aislados que coincidieron en el centro de trabajo.
El cateo
El pasado 24 de mayo, la Fiscalía Especial en Personas Desaparecidas (FEPD) en coordinación con peritos del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, realizaron un cateo en la finca donde fueron vistos por última vez los cuatro jóvenes que desaparecieron en Zapopan.
En el lugar se obtuvieron diversos indicios que se integraron a la carpeta de investigación. En la investigación se descubrió que Jesús, Itzel, Carlos y Arturo ya no retornaron a sus domicilios después de presentarse a trabajar al call center. También se informó que el automóvil de Robles Corona fue encontrado estacionado a las afueras del sitio. Sus hermanos se lo llevaron.
El cambio de ruta de los hermanos
Elizabeth Hernández, madre de Abigail y Carlos David Valladolid, explicó que el pasado lunes a las 6:50 de la mañana salieron de casa para dirigirse al trabajo y a las 7:15 fue el último momento cuando habló con su hija debido a que había un incidente de tránsito, para alertarles y que tomarán una ruta alterna.
Lo último que Elizabeth tuvo conocimiento fue que estaba libre la carretera, luego de meterse en calles de la Venta del Astillero y que ya iban de camino a su trabajo, ambos trabajaban en el mismo lugar.
“Trabajaban en el mismo lugar y por las mañana salían todos los días casi por lo regular a las 5 de la mañana porque van al gimnasio en Avenida Clouthier. Ese día no (fueron) porque mi hija acababa de llegar de viaje de Puerto Vallarta y llegó tarde entonces estaba desvelada y ese día salieron más tarde”, explicó.
Abigail y Carlos tenían alrededor de tres meses trabajando en este lugar y trabajaban en el área de cobranza telefónica en el extranjero porque son bilingües.
Una desaparición previa
Para la familia de Carlos Benjamín García Cuevas, la desaparición del joven de 31 años constituye una doble tragedia, pues lamentablemente no es la primera vez que lo viven. El 20 de septiembre de 2017 su hermano, Edgar Fernando García Cuevas, desapareció cuando salió de su casa en la avenida Terranova para tomar el camión que lo llevaría a su trabajo, al cual nunca llegó.
Desde esa fecha, el joven que al momento de su desaparición tenía 20 años, continúa como no localizable. Su hermano no ha dejado de compartir su ficha de búsqueda en sus redes sociales.
Con información de Mayeli Mariscal, FGE de Jalisco y redes sociales
Fuente: El Heraldo de México