El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se reunirá mañana con dueños de hoteles en Acapulco para analizar el reestreno de al menos una treintena de estos en el primer trimestre de 2024.
Lo anterior lo adelantó el propio mandatario federal en su Mañanera de este lunes, en la que dijo que:
“Vamos a tener esta semana, aquí en Palacio, con ellos y otros vamos a tener reunión, va a estar también el presidente del Consejo Coordinador empresarial, Francisco Cervantes, es probable que sea mañana por la mañana porque yo voy a Acapulco, mañana también, a las cuatro de la tarde tengo una reunión, entonces ahí vamos avanzando”.
Esto, porque de motu proprio el titular del Ejecutivo federal dijo que este domingo habló con algunos dueños de hoteles con quienes acordó no cancelar el Tianguis Turístico de Acapulco de abril próximo, y además de que se logró el acuerdo de que:
“Vamos a hacer un esfuerzo conjunto para que cuando menos estén funcionando, se reestrenen 35 hoteles para marzo-abril del año próximo, inclusive ya el dueño del hotel de las brisas, ayer que hablé con él, Antonio Cosío, me mencionó que están pensando en tener ya habitaciones en un 75 por ciento de toda su capacidad para diciembre”.
Además, informó López Obrador que también conversó con el empresario Juan Antonio Hernández, dueño de 2 hoteles en el puerto, quien se comprometió también a que entre marzo y abril reabran sus recintos.
Y no solo eso, también conversó con Carlos Slim y Daniel Chávez -2 de los empresarios más cercanos a su gobierno:
“Pude hablar también con Daniel Chávez de Vidanta y lo mismo se compromete a que en marzo-abril están ya sus hoteles en Acapulco y también nos ha ayudado mucho, ha aportado bastante con agua, enviando equipos; Carlos Slim, y también tiene un hotel, se llama Calenda, que se compromete a tenerlo de pie”.
Todo ello -reiteró el mandatario- con la intención de que el Puerto de Acapulco esté de pie lo más pronto posible, de tal suerte de que se cumpla su compromiso de que los guerrenses afectados por el paso de Otis no tengan “una amarga Navidad”.
Fuente: 24 Horas