*A pesar de tal despilfarro de recursos, ni diputados ni órganos de fiscalización han promovido auditorías para saber a dónde fueron a parar esos montos multimillonarios
*Entre el 80 y 100 por ciento de la red de suministro de agua potable de Oaxaca de Juárez y área conurbada es inservible debido a la existencia de fugas y tuberías colapsadas; la red de drenaje está en las mismas condiciones
*Y viene lo peor: la sequía severa y extrema que actualmente se vive en Oaxaca empeorará las condiciones al comienzo de 2024, advierten expertos
Entre el 80 y 100 por ciento de la red de suministro de agua potable de Oaxaca de Juárez y área conurbada es inservible debido a la existencia de fugas y tuberías colapsadas, a pesar de que durante los últimos 10 años las instancias encargadas de garantizar el mantenimiento y la rehabilitación de la infraestructura han gastado prácticamente 11 mil millones de pesos de recursos públicos.
Durante los últimos dos sexenios, el de Gabino Cué Monteagudo y Alejandro Murat Hinojosa, la administración estatal justificó erogaciones anuales, en promedio, de mil millones de pesos para el presunto funcionamiento del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SOAPA) y de la Comisión Estatal del Agua (CEA); sin embargo, hoy, las autoridades argumentan que no tienen la capacidad de dotarle del servicio al menos al 80 por ciento de la población a raíz del colapso de la infraestructura y de un intenso estrés hídrico que aqueja a las regiones, en una crisis nunca viste en Oaxaca.
De acuerdo con una serie de revisiones hechas por este medio a las cuentas públicas de los últimos 10 años y a los avances financieros reportados en este 2023, el hoy denominado SOAPA, antes SAPAO, encargado de abastecer de agua potable a la zona metropolitana, ejerció entre 2012 y 2022 un total de 3 mil 892 millones de pesos, incluidos 288.1 millones de pesos ejecutados durante los primeros nueve meses del ejercicio actual.
Por su parte, la CEA, cuya obligación es reglamentar, promover y realizar obras y acciones en la entidad para el aprovechamiento sustentable del agua, ejerció 7 mil 46 millones de pesos.
Sin embargo, esta última dependencia no ha llevado a cabo ningún proyecto para mejorar el suministro a través de la diversificación de los métodos de captación de aquel recurso natural.
Colapso
A pesar de la erogación de tales cantidades de recursos, que llegan al estado a través de Participaciones y Aportaciones federales, y gracias a la recaudación propia, a través del cobro de recibos y recargos por la dotación del servicio, durante este año Soapa ha justificado que no cuenta con recursos para garantizar el servicio.
De los mil 100 litros por segundo de agua que requiere el organismo para dotar a las familias capitalinas, sólo dispone de 240 litros; es decir, opera con un déficit del 80 por ciento.
Sin embargo, ello no significa que el 20 por ciento de la población pueda tener acceso a esos 240 litros de agua extraídos por segundo diariamente, pues entre el 90 y 80 por ciento se pierde en fugas y prácticas irregulares como el huachicol, nombre con que activistas han bautizado a la práctica por medio de la cual decenas de pipas, de entre mil y 10 mil litros, se abastecen a través de la propia red de Soapa, lo que permite a los particulares vender ese producto entre la población necesitada.
Para el Colectivo de Organizaciones Ambientalistas del Estado de Oaxaca (COAO) el 50 por ciento del agua que genera el gobierno estatal se pierde en “tráfico ilegal” y del resto, entre el 50 y 40 por ciento, se pierde en fugas.
En tanto, el Instituto de la Naturaleza y Sociedad de Oaxaca (INSO) estimó, en mayo pasado, ante una consulta hecha por este medio, que el agua que se pierde en fugas asciende a 40 por ciento.
En lo que respecta al huachicol, el organismo no gubernamental, que ha trabajado de manera paralela con autoridades estatales en busca de planes para la conservación de áreas naturales, refirió que entre el 33 y el 100 por ciento del líquido con que se suministran colonias populares y el propio Centro Histórico provienen del tráfico ilegal.
A partir de las cifras contempladas por las agrupaciones, se establece que únicamente entre el 20 y 10 por ciento del agua de SOAPA llega a los hogares.
Drenaje, también colapsado
El otorgamiento del servicio de agua potable no es el único colapsado en la zona metropolitana, a pesar de los miles de millones de pesos invertidos supuestamente en ese sector.
En agosto pasado, el Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SOAPA) dio a conocer que de los 20 mil kilómetros de tuberías que conforman la red de drenaje del área conurbada, al menos 14 mil kilómetros registraban diversos tipos de daños.
La dependencia, al igual que en el caso del servicio de agua potable, sostuvo que las deficiencias se debían a que las administraciones anteriores no cumplieron con el mantenimiento requerido.
Lo anterior, justificó la entidad, se ha traducido en que las redes de drenaje también se encuentren colapsadas.
SOAPA estimó que 6 mil kilómetros de tubería son actualmente funcionales y que, en el resto, las zonas por las que atraviesa son susceptibles a registrar fugas de aguas negras o incluso socavones.
Quejas, pese a anuncio de dotación de pipas
La infuncionalidad de la red de agua potable ha provocado crisis y brotes de conflictos sociales en diversos puntos de la zona metropolitana durante los últimos meses.
Vecinos de las agencias de Viguera y Pueblo Nuevo llevaron a cabo protestas callejeras debido a que han permanecido sin el servicio hasta 90 días en diversos periodos, mientras que en otros sectores de la zona urbana, como Santa Rosa, la colonia Volcanes y el Infonavit Primero de Mayo, los ciudadanos denuncian prácticamente todos los días lapsos de hasta un mes sin acceso al líquido.
Las condiciones se han replicado en municipios conurbados como San Antonio de la Cal, San Jacinto Amilpas y Santa Lucía del Camino.
En un intento por acallar las protestas y la inconformidad social, las autoridades estatales anunciaron durante la última semana del pasado mes de octubre, la implementación del programa “Juntos llevamos vida”, que consiste en la dotación por medio de pipas.
Sin embargo, a prácticamente un mes del arranque de tal acción las quejas de las colonias han permanecido en el mismo nivel.
Prevén aumento de crisis
Por su parte, especialistas de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y de la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPCO) alertar que la falta de disponibilidad de agua potable se intensificará en el transcurso de los siguientes meses, a raíz de la sequía severa y extrema que afecta actualmente al estado.
En la actualidad, los 20 municipios que conforman la zona metropolitana de Oaxaca capital han sido diagnosticados con sequía moderada; no obstante, en caso de que durante las próximas semanas se agudice la falta de lluvia, el nivel de sequía podría aumentar.
Lo anterior provocará que los mantos freáticos disminuyan aún más sus niveles, por lo que llamaron a las autoridades competentes a buscar mecanismos que eficienten la distribución del agua potable entre la sociedad.
Opacidad total
Debido a las condiciones climáticas que han predominado en este 2023, la etapa de sequedad y sequía se prolongará durante los meses de diciembre, enero, febrero, marzo y abril, por lo que reiteraron que es necesario un plan para contener los estragos.
A pesar de tal despilfarro de recursos públicos durante los últimos 20 años, que han llevado a la zona metropolitana y otros puntos de la entidad a una crisis sin precedente por el abasto de agua potable, ni los diputados locales ni los órganos de fiscalización han promovido auditorías para confirmar a dónde fueron a parar los 11 mil millones de pesos que han gastado CEA y SOAPA y que en materia de infraestructura son imperceptibles.