Representantes de la empresa denominada Ruta Coatlanes-Costa instalaron un “filtro de vigilancia” a la altura del kilómetro 36 de la carretera Oaxaca-Puerto Escondido, inaugurada ayer, con el fin de impedir que vehículos de otras líneas de pasaje transiten sobre aquella vía.
El grupo de personas se mantiene a un costado de la carretera y permite la circulación tanto de unidades particulares como de otras modalidades de carga.
Los representantes de la Ruta Coatlanes-Costa argumentan que, “según acuerdos con las autoridades”, los concesionarios de aquella agrupación son los únicos que pueden brindar el servicio de transporte de pasajeros en la nueva carretera.
Mientras tanto, autoridades de seguridad de Oaxaca informaron que otro grupo de pobladores, éste del municipio de Ejutla de Crespo, al sur de los Valles Centrales, mantiene presencia sobre el kilómetro uno de la misma vialidad, pero con la consigna de “evitar” el cierre de la circulación .
A ello se suma que un tercer grupo, conformado por conductores de la empresa de camionetas de pasaje Líneas Unidas, permanece a las afueras la ciudad de Oaxaca, a la altura del crucero del aeropuerto, y amagó con dirigirse hasta la zona donde se encuentran los transportistas de la Ruta Coatlanes-Costa.
*Autoridades llaman al diálogo*
Por su parte, la autoridad estatal sostuvo que el gobierno federal es la única instancia facultada para otorgar los permisos de circulación sobre la nueva vialidad.
“La Secretaría de Gobernación (Segob) y la Secretaría de Infraestructuras, Comunicaciones y Transportes (SICT) convocaron a una mesa de diálogo entre las personas involucradas para alcanzar acuerdos”, indicaron las autoridades estatales al respecto.
De acuerdo con los reportes, el tránsito de vehículos particulares y de la ciudadanía en el tramo carretero Barranca Larga – Ventanilla de la autopista Oaxaca-Costa “está garantizado”.
Al cierre de este reporte, se informó sobre la instalación de una mesa de diálogo.