Mario Romero/Álvaro Morales
La marcha del dos de octubre en la ciudad de Oaxaca culminó sin incidentes mayores, a pesar de que las autoridades y dueños de comercios establecidos se prepararon para recibir una serie de actos vandálicos como en años anteriores.
Por segunda ocasión consecutiva, luego de que las autoridades estatales anunciaron la apertura de carpetas de investigación por los destrozos causados por los normalistas en las movilizaciones que realizaron hasta el pasado 21 de septiembre, los integrantes de la Coordinadora Estudiantil Normalista del Estado de Oaxaca (CENEO) se limitaron hoy a caminar por las calles y lanzar consignas contra “la violencia” y la “represión del estado”.
El contingente salió de la calzada Madero en el entronque con avenida Tecnológico, al poniente de la ciudad de Oaxaca, una condición que sí desquició el flujo vehicular durante las primeras horas de la tarde.
A su paso por las calles, decenas de establecimientos cerraron sus puertas ante el temor de que se suscitaran hechos violentos como los del pasado 21 de septiembre, cuando los futuros maestros vandalizaron diversos establecimientos de la colonia Reforma.
En el caso inmuebles gubernamentales como el Palacio de Gobierno, estos fueron rodeados por vallas metálicas.
Así, el contingente se dirigió al Zócalo donde realizó un mitin y posteriormente rompió filas.
“Es triste que, hasta ahorita, aquellos que protestan por el futuro de México siguen siendo asesinados, masacrados y desaparecidos”, reclamó uno de los oradores durante el mitin frente a Palacio de Gobierno.
“A más de medio siglo de este capítulo histórico de México las represiones persecuciones o el hostigamiento no han cesado*, agregó el hombre, quien al igual que sus compañeros iba encapuchado.
Los normalistas condenaron que lejos de resolverse los crímenes cometidos el 2 de octubre de 1968, México ha sido testigo de nuevos ataques, como los perpetrados contra los normalistas de Ayotzinapa.
“A 10 años, el gobierno se sigue lavando las manos… no ha dado respuestas. Y no solamente con los compañeros de Ayotzinapa, sino también en nuestro estados, aquí en Oaxaca, las normales de Oaxaca siguen siendo reprimidas, hostigadas por el gobierno
“Hasta la fecha los estudiantes normalistas seguimos siendo blanco del estado. Sin embargo queremos dejar un mensaje claro sus represiones no nos intimidan”, continuaron.