“Pablo López Alavés no es preso político, es un asesino, y pedimos a la Sección 22 y al CIPO que deje de chantajear al gobierno, a las autoridades dictar sentencia condenatoria”, destacó Juan Cruz Ruiz, vecino de San Miguel Alóapam, región de la Sierra Norte.
Explicó que Pablo López es acusado del delito de homicidio cometido contra Marín Jiménez Santiago y de tentativa de homicidio contra otras personas más, hechos cometidos el 18 de junio del 2007.
Indicó que lo único que exigen a las instancias encargadas del caso es que se imparta la justicia sin ceder a ningún tipo de chantaje por parte de la Sección 22 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación.
“Pablo López Alavés no es ni preso político ni ecologista, es mentira todo lo que han dicho de él para favorecerlo, ahí vemos que además de la Sección 22, también el Consejo Indígena Popular de Oaxaca están presionando a las autoridades para que lo liberen, aún con las pruebas que lo inculpan”, denunció.
Destacó que ha trascendido que por la presión que el CIPO y la Sección 22 pretenden liberar a Pablo López Alavés, situación que ha causado la molestia del pueblo de Alóapam, quienes están en plantón en el Centro de Readaptación Social en la Villa de Etla desde hace varios días.
Puntualizó que el llamado es al Gobernador del Estado, Alejandro Murat Hinojosa, y el Fiscal General Rubén Vasconcelos Méndez, para que se aplique el estado de derecho en Oaxaca y no se dejen llevar por presiones para resolver el caso.
Cabe señalar que integrantes del llamado Bloque de Organizaciones Sociales Anticapitalistas instalaron un plantón el miércoles pasado en el zócalo de la capital frente a palacio de gobierno, exigiendo la libertad de Pablo López Alavés, y amagando con boicotear las fiestas de la Guelaguetza.