El presidente estatal del Partido de la Revolución Democrática, Raymundo Carmona Laredo, afirmó que quienes se dijeron ser redentores de la democracia, son sólo un reciclaje de personajes grises, sin trascendencia política o en su caso, que tienen un pasado oscuro en la vida política del país.
Con motivo de la capacitación que está realizando el PRD a sus autoridades municipales, declaró que muchos militantes de Morena, tuvieron también orígenes en el PRD en donde no encontraron cabida para satisfacer sus ambiciones personales y de grupos, otros surgieron del PRI, de las etapas más agrias del “priismo recalcitrante”, de los años 90 con el salinismo y de la época de Ernesto Zedillo.
“Ahora los vemos que ocuparán los cargos del primer nivel en el gobierno de la famosa cuarta transformación, y estamos convencidos que esa luna de miel que ahora viven, será muy corta”, dijo.
Destacó que con las declaraciones del presidente electo se ha visto que no cumplirá muchas de sus promesas de campaña, se ha retractado y ha dicho que no bajará la gasolina, que no habrá amnistía para los delincuentes, que el salario mínimo solamente subirá 26 pesos y no al cien por ciento como se había anunciado, que las reformas anunciadas a erogarse se someterán a consultas con “foros erráticos sin sustento y el repudio absoluto de los asistentes”, que el ejército seguirá en las calles y que se nombrarán en los estados los súper secretarios anticonstitucionales.
Por parte del PRD, destacó, se reconoce una cris profunda como instituto político, lo que les obliga a realizar una profunda revisión al interior del partido que les permita identificar con claridad los errores cometidos, principalmente por las malas decisiones de las cúpulas partidarias.
Destacó que esos errores han significado la pérdida de su identidad política, lo que generó como resultado que el 1 de julio sólo obtuvieran 5.5 por ciento de la votación nacional y 7.85 por ciento estatal, en el marco de una participación ciudadana nacional que alcanzó el 63.42 por ciento en el que la ciudadanía expresó en las urnas un voto anti sistémico manifestando su repudio hacia la política del régimen y a su hartazgo a la inseguridad, corrupción, impunidad, pobreza y desigualdad, producto de una política neoliberal equivocada e impuesta por el gobierno de la república.
Abundó que aun así tendrán 9 senadores, 21 diputados federales, 2 diputados locales en Oaxaca y 26 municipios ganados desde donde serán una fuerza de oposición contestataria que contribuya a incorporar a la ciudadanía y profundizar los cambios necesarios en el terreno político, económico y social del país.