México.- Autoridades han dispuesto albergues, tiendas de campaña, alimentos y ayuda humanitaria para la caravana migrante que huye de la violencia y la pobreza en Centroamérica, mientras en el País el problema del desplazamiento forzado de miles de mexicanos está lejos de ser resuelto.
La mayoría no ha podido retornar a sus hogares, vive en condiciones precarias, sin servicios básicos, acceso a educación ni apoyo gubernamental y, en el peor de los casos, con el riesgo de volver a sufrir agresiones de los grupos de ocasionaron su desplazamiento, según activistas y defensores de derechos humanos.
Apenas este sábado, unas mil 800 personas que salieron huyendo de cinco pueblos de la sierra de Guerrero intentaron regresar a sus hogares en una caravana en la que iban funcionarios del Gobierno, personal de la CNDH y periodistas, pero fueron atacados a balazos.
Otro caso reciente es el de Chavabejal, en los Altos de Chiapas, donde mil 700 personas salieron huyendo el 7 de noviembre y no han podido regresar a su comunidad.
En 2017 se registraron 25 episodios de desplazamientos internos forzados masivos en México, afectando a 20 mil 390 personas, según la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (Cmdpdh).
De octubre de 2005 a noviembre de este año, 4 mil 231 personas han huido de sus hogares en Chiapas, de acuerdo con un recuento del Centro de Derechos Humanos Kuúntik, el Fray Bartolomé de las Casas, el Comité de Derechos Humanos Digna Ochoa y la activista Lilian León.
Ese desplazamiento se concentra en 10 comunidades de los Altos. Además en los episodios de desplazamientos se han registrado 23 muertes, 5 desapariciones y 2 detenciones. Esta cifra supera por mucho a la que el Gobierno del Estado reconoce.
muerto villas manantial – Un trabajador de una frutería fue asesinado a balazos en la entrada de un minisuper ubicado en la esquina de la calle manantial de imala y avenida tenochtitlán en el fraccionamiento villas del manantial. De acuerdo con el reporte el occiso se encontraba repartiendo producto cuando un invididuo desconocido lo atacó con arma de fuego a corta distancia y luego huyó con rumbo desconocido.(Guillermo Vega/El Debate)
Imagen temática. Foto: Guillermo Vega/EL DEBATE
De acuerdo con datos recabados, las personas desplazadas soon principalmente indígenas tzeltales y tzotziles.
La causa principal del fenómeno son la operación de grupos armados y en menor medida, conflictos religiosos y desastres por fenómenos naturales.
Los Municipios afectados son Ocosingo, Zinacantán, Chenhaló, El Bosque, Aldama, Chalchihuitán, Tenejapa, Huixtán, Huixtla y Tonalá.
La mayoría de afectados viven en bodegas, casas que rentan en grupos, en las montañas, parroquias, campamentos hechos con tiendas de plástico y galeras.
“Aun cuando esa cifra (4 mil 231) es mucho mayor a la que reconoce el Gobierno de Chiapas, hay muchas más personas desplazadas que el Gobierno no tiene claro, sólo se ha atendido con despensas y no se ha atacado el corazón del problema como desarmar a estos grupos, el problema es grande”, dijo Arturo Lomelí González, profesor investigador del Centro de Estudios para Para la Construcción de la Ciudadanía y la Seguridad de la Universidad Autónoma de Chiapas, experto en desplazamiento forzado.
El Consejo para la Atención de Desplazamiento Interno de Chiapas que preside el Gobernador Manuel Velasco, reconoce 352 familias desplazadas.
Guerrero, a la deriva