A tres días del término de la administración de José Antonio Hernández Fraguas y apenas un año de que anunciara la limpieza en la primera cuadra de Flores Magón, vendedores ambulantes regresaron multiplicados a esta calle, las aledañas, el zócalo y la Alameda de León en el Centro Histórico.
La instalación de los vendedores ambulantes inició apenas culminó la administración del Edil de extracción priista, incluso no respetaron el miércoles sin ambulantes que anunció como “programa exitoso” en octubre pasado la administración que sólo duró dos años.
Con José Antonio Hernández Fraguas también se instaló, el año pasado, un grupo de pobladores de San Juan Copala liderados por Lorena Merino que se autodenominan “desplazados de Copala”, quienes iniciaron con dos puestos y actualmente tienen más de ocho ocupando ambos lados de Flores Magón.
Frente a templos históricos y patrimonio cultural de la humanidad como de la Compañía de Jesús y Santo Domingo, también se encuentran instalados estos vendedores, quienes ofrecen desde bisutería, ropa industrializada que hacen pasar por “típica”, lentes, productos de madera, hasta cocteles y de todo tipo de comida.
Por esas calles céntricas se ha visto a dirigentes del comercio informal como Carmela Luján, dando declaraciones a reporteros de distintos medios, diciendo que están dispuestos a negociar con la administración de Oswaldo García Jarquín, quien el 1 de enero pasado rindió protesta como Presidente Municipal.
Mientras comerciantes establecidos sacaron sus mercancías a la calle, donde ofertan sus productos a la gente, en protesta porque ambulantes nuevamente invadieron el Centro Histórico de Oaxaca.