De horchata, chilacayota, jamaica, naranja, fresa con tuna, chía y muchos sabores más fueron las aguas que decenas de personas ofrecieron a cientos más, sobre la calle Macedonio Alcalá, “Andador Turístico”, en el Centro Histórico de la capital con motivo del Día de la Samaritana. En calles de los alrededores también fueron ofrecidas estas bebidas.
Una agrupación musical acompañó la emotiva celebración, que nace a partir de la conmemoración de un pasaje bíblico en el que de acuerdo a la iglesia católica, Jesús tuvo un encuentro con una mujer de Samaria, a quien pidió agua y a su vez, ofreció el agua de la “vida eterna”.
Algunas mujeres y hombres que ofrecieron aguas en este día, portaron vestimenta tradicional, donde se sumaron representantes de cámaras empresariales, comercios, escuelas y colegios, así como personas de la sociedad civil.
Familias enteras, y con vasos en mano, pasaron a los puestos que fueron colocados frente al templo de la Preciosa Sangre de Cristo y que comenzaron a pedir sus aguas después del mediodía, pues previo a ello el Arzobispo de Oaxaca, Pedro Vázquez Villalobos, realizó la bendición de las aguas.
Llama Arzobispo a cuidar el agua en Día de la Samaritana
Con motivo de la bendición de las aguas en el Día de la Samaritana, el Arzobispo Pedro Vázquez Villalobos hizo un llamado a la sociedad a cuidar el agua pues hay muchas comunidades comienza a escasear.
Mencionó que sin agua no se puede realizar la siembra de frutas, verduras y otros productos, que permite a las familias salir adelante, e incluso enfrentar condiciones de pobreza y pobreza extrema.
Dijo que lo triste es que mucha gente no cuida el agua, al ver que tienen en abundancia la desperdicia, lo que a la larga traerá consecuencias más graves.
Por otra parte, llamó a feligreses a aprender de Jesús, quien habló a la mujer de Samara desde el corazón, pus de esa manera se tiene que hablar al prójimo, que lo que salga de nuestros labios no hiera, ofenda, humille, maltrate o desprecie a ninguna persona.
“Y que importante es para nosotros también seamos esa fuente de agua de la que puedan beber nuestros hermanos, hay momentos en que el hermano siente necesidad de ser amado, de sentirse amado, que encuentre en tí esa fuente del amor”, destacó.