Veracruz.- Tras sufrir el inicio de año más violento de la historia reciente de México, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) decidió este lunes no modificar ni un ápice su estrategia de seguridad y prometió que en seis meses comenzará a dar resultados.
López Obrador celebró la reunión diaria con su equipo de seguridad en el oriental estado de Veracruz, que el pasado viernes volvió a sufrir un grave episodio de violencia con la matanza de 14 personas en el municipio de Minatitlán.
El presidente atribuyó ese episodio a los anteriores gobiernos federales y estatales, que mantenían un “contubernio” con el crimen organizado, y prometió reducir en seis meses la criminalidad en el país.
Se desató la violencia pero la estamos estabilizando, que no continúe la tendencia de incremento en violencia. Nos va a llevar algún tiempo pero va a empezar a bajar, prometió.
Seis meses son el tiempo que necesita, según dijo, para consolidar su estrategia de seguridad que está basada en tres puntos: la mejora del bienestar de la ciudadanía, la creación de la Guardia Nacional y la erradicación de la corrupción.
El mexicano no es malo por naturaleza”, sostuvo el mandatario, y dijo que “lo fundamental es que haya trabajo, se atienda a los jóvenes y haya bienestar.
Según AMLO, el programa de becas que está impulsando su Gobierno, en funciones desde el pasado 1 de diciembre, evitará que los jóvenes caigan en las redes del crimen organizado.
Además, recordó que la creación de la Guardia Nacional, un nuevo cuerpo de seguridad pública, dotará al presidente de miles de policías y soldados para garantizar la seguridad del país.
Esto pese a las críticas de organizaciones civiles que han denunciado numerosos casos de violaciones a los derechos humanos cometidos por las Fuerzas Armadas durante la más de una década que llevan desempeñando tareas de seguridad pública en el contexto del combate al narcotráfico.
Cuando tengamos presencia en todo el país, que ahora no hay, vamos a garantizar la seguridad pública, dijo sobre la futura Guardia Nacional.
Y aseguró que el nuevo Gobierno federal erradicará la corrupción que hasta ahora había en todos los niveles de la administración, que estaban coaligados con el crimen organizado.
“Dejaron el estado del país en una situación lamentable de crisis, corrupción y contubernio entre delincuencia y autoridades. Esta es la herencia que se recibió en el país y, de manera particular, en Veracruz”, lamentó López Obrador.
Trece personas -cinco mujeres, uno niños y siete hombres- murieron el pasado viernes en un ataque que un grupo armado perpetró en una fiesta privada en Minatitlán. Los hombres buscaban llevarse a un sujeto, pero los asistentes de la fiesta intentaron impedirlo, por lo que fueron atacados a tiros.
Este domingo, un grupo armado mató a balazos a una madre y a su hija que viajaban en coche en el suroriental estado de Tabasco en un ataque en el que resultaron heridos dos menores.
La familia de las víctimas posee una empresa de transporte de carga que opera en una zona controlada por grupos dedicados al robo de combustible, delito conocido en México como huachicoleo.
México reportó 8.493 asesinatos en el primer trimestre de 2019, la cifra más alta desde 1997, cuando se comenzó a realizar este registro.
El año pasado, todavía bajo la presidencia de Enrique Peña Nieto (2012-2018), se registraron 33 mil 369 asesinatos, siendo el más violento desde 1997.
López Obrador ha sido criticado durante los últimos días por la falta de resultados de su estrategia de seguridad y por haberse mantenido en silencio tras la matanza de Minatitlán.
“Nuestros adversarios, que callaban como momias cuando se estaba saqueando el país y se convirtió a nuestro país en un cementerio, ahora gritan como pregoneros”, reprochó el presidente.
También arremetió una vez más contra la “prensa fifí”, en referencia a los medios de comunicación conservadores que lo critican, y prometió que “van a cambiar las cosas por el bien de México”.
“Ellos quisieran que fracasemos pero se van a quedar con las ganas”, sentenció.