México.- Fosas reutilizadas y un ‘modus operandi’ cada vez más elaborado son algunas de las características de las 222 fosas con 337 cuerpos localizadas en México desde el 1 de diciembre hasta el 13 de mayo, informó este martes el Gobierno federal.
“Desde el 1 de diciembre al 13 de mayo se han ubicado 81 sitios con 222 fosas clandestinas y 337 cuerpos”, dijo el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, en una conferencia de prensa en Palacio Nacional.
Pese a estas escabrosas cifras, Encinas explicó que siempre se “ocultó o minimizó” la información, y a menudo se mezclaban datos de homicidios con los de desaparecidos.
El nuevo programa del Gobierno publicará los registros de fosas clandestinas y cuerpos hallados cada 15 días.
Reporte de Fosas clandestinas https://t.co/mFpUQI2pq9 pic.twitter.com/vaomtcWHoO
— Alejandro Encinas (@A_Encinas_R) May 14, 2019
En los datos propios que han obtenido en estos cinco meses y medios de administración, los estados con más sitios, fosas y cuerpos son Colima, Tabasco, Sonora, Zacatecas, Guerrero, Jalisco, Veracruz y Sonora.
Son datos con gran movilidad y dinamismo, están en proceso las tareas de exhumación, apuntó.
El Registro Nacional de Fosas se elabora con información de la Comisión Nacional de Búsqueda, de la Fiscalía General y fiscalías estatales y datos aportados por familiares de víctimas.
Este mapa del dolor, que atraviesa buena parte de México, es en realidad mucho mayor que las cifras obtenidas hasta el momento por el nuevo Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Tal y como reflejó el informe presentado este lunes, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) contabilizó, entre 2007 y 2016, 855 fosas y 1.548 cadáveres.
En tanto, un informe del Laboratorio de Investigación e Innovación Periodística, El Quinto Elemento, señaló que del 2006 al 2016 se descubrieron 2.000 fosas en el país.
De esta manera, y según estimaciones oficiales dadas a conocer en febrero, el país acumula más de 40 mil desaparecidos, 26 mil cuerpos sin identificar en morgues y 1.300 fosas clandestinas.
“En todos aquellos lugares donde recibimos denuncias anónimas o abiertas o tenemos indicio de que existe la posibilidad de una fosa vamos a ir directamente”, apuntó Encinas, que explicó que toda la información se está georreferenciando.
Adicionalmente, está por concluir el Diagnóstico Nacional Forense, elaborado durante abril, que busca fortalecer las capacidades de este tipo de servicios médicos.
El subsecretario explicó que la “dinámica” alcanzada por este fenómeno “se denota no solo en el número importante de fosas sino también en las prácticas” identificadas.
Por ejemplo, una fosa en Nayarit, en el oeste del país, se localizó a cuatro metros de profundidad, y se requirió maquinaria pesada para poder acceder a ella.
Y en el municipio de Iguala (Guerrero), tristemente conocido por la desaparición de 43 estudiantes en 2014, se tienen “ya fosas prefabricadas”.
E incluso “recicladas”, donde ya se han exhumado cadáveres, pero se han vuelto a utilizar.
Y criticó el existente Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas por presentar información “no confiable”.
Finalmente, Encinas se comprometió a, con la ayuda de organismos internacionales, mejorar tanto el sistema de registro y búsqueda como de atención a los familiares.
El Gobierno de México anunció el 24 de marzo la reinstalación del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, considerando que es “prioritario” atender esta tragedia nacional.
Días antes, se creó la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas.
Sobre esta tragedia, López Obrador dijo este martes: “Es la herencia de una política equivocada y fracasada para enfrentar la violencia en el país”.
Pese a la “dolorosa” situación, se comprometió a informar sobre las fosas clandestinas, y reconoció que la situación sigue aconteciendo.
No se puede de la noche a la mañana terminar con esta herencia de inseguridad y de violencia, apuntó.
Como parte de su plan de pacificación está la recientemente creada Guardia Nacional -conformada por policías, navales y militares- pero también la atención a las causas de la violencia, como la adicción a las drogas.
Por ello, este martes, el portavoz de Presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, anunció el lanzamiento de cuna campaña llamada “Escuchemos primero” para desalentar el consumo de drogas por parte de la juventud mexicana.
Según explicó, esta campaña de difusión, en la que participarán artistas y deportistas, buscará “cambiar completamente la narrativa y los prejuicios construidos a partir de la guerra contra el narcotráfico”.
“En lugar de la persecución, la estigmatización y criminalización de las personas que usan sustancias psicoactivas o drogas, tenemos que buscar la dignificación, el respeto a sus derechos y la ayuda”, expresó.
Además de esta campaña de sensibilización, Cuevas explicó que se ampliarán los centros de salud par la rehabilitación de adicciones tanto en zonas urbanas como rurales de todo el país.