De acuerdo a la restauradora de bienes muebles del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) delegación Oaxaca Carolina Olvera Yerena, hasta la fecha el 30% de los monumentos inmuebles que fueron afectados durante los sismos de septiembre de 2017 han sido intervenidos, por ello los trabajos se harán de manera paulatina hasta cubrir los 587 afectados.
En entrevista Olvera Yerena aseguró que de estos 587 corresponden a templos, museos, casas de cultura y monumentos arqueológicos, de ahí que el INAH realice la supervisión de los trabajos de restauración de los bienes inmuebles.
“El INAH se encarga de controlar técnica y normativamente los trabajos de restauración de los bienes inmuebles afectados por los sismos del 2017, es la institución rectora de todos los trabajos de conservación que se pretenden hacer sobre el patrimonio de la nación”, enfatizó.
Detalló que entre los inmuebles afectados por los sismos se encuentra el Templo de Patrocinio, la Merced, la Guadalupe, el de San Andrés Huayapam y Tlalixtac de Cabrera, así como en el Istmo con el templo de San Vicente Ferrer, de San Jerónimo Doctor en Ixtepec, solo por mencionar algunos.
Afirmó que durante las primeras horas del sismo recibieron 683 reportes de afectaciones, los cuales después de corroborar se encontraron 587 afectaciones que fueron históricos y arqueológicos.
Carolina Olvera Yerena aseguró que para el proceso de restauración existen lineamentos generales de conservación que hablan de que monumentos deben ser conservados de manera estética, social, además de que los métodos y material que se intervengan deben ser respetuosos y compatibles con químicos con lo que constituye los bienes.
Dijo que los bienes culturales se clasifican en tres grupos: bienes inmuebles los cuales son los edificios como templos, museos, casas de cultura; mientras que los bienes muebles se refieren a todos los monumentos que se pueden trasladar como punturas, esculturas, escritos litúrgicos, textiles, entre otros.
“Es un trayecto amplio que lleva mucho tiempo, ya que una vez que hay especialistas presentan sus proyectos el INAH, se revisan los proyectos, esto lleva tiempo para revisar y asegurar que los monumentos se van a intervenir adecuadamente y el trabajo permitirá recuperar su imagen y seguir con su arquitectura”, finalizó.