• María Tanivet Ramos Reyes es aspirante a comisionada del órgano de transparencia en Oaxaca
• Se deslinda de señalamientos sin sustento
La oaxaqueña María Tanivet Ramos Reyes, aspirante a comisionada del Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Estado de Oaxaca (IEAIP), afirmó que sólo el 5.6 por ciento de la población en el país y el estado, está ejerciendo su derecho de acceso a la información, donde es necesario que el órgano de transparencia local focalice sus acciones.
“Si estamos viendo que el derecho no se está ejerciendo, deberíamos analizar qué está pasando, qué condiciones están limitando a estos grupos poblacionales para que exista esta situación. La lógica del órgano garante tiene que transitar de sólo decir ahí está la plataforma y pregunten, a trabajar en mecanismos que faciliten a las personas sujetas de derecho, el que puedan preguntar”, sugirió.
María Tanivet Ramos, licenciada en Ciencias Políticas y Administración Pública, originaria del Istmo de Tehuantepec, sostuvo que dentro de su experiencia el primer trabajo que tuvo fue en un ayuntamiento de Puebla, después en la Comisión Municipal de Transparencia en donde participó para su creación en el 2005 y de ahí en la transparencia es donde más se ha especializado.
Indicó que también estuvo en el Colectivo Ciudadanos por Municipios Transparentes, unidad Puebla, donde hicieron la primera reforma a la Ley de Puebla en el marco de la Ley de Transparencia 2008.
Precisó que lo más destacado de su trayectoria es que ha trabajado tanto con la sociedad civil como desde la unidad de transparencia, su última actividad fue coordinando la parte operativa del proyecto de fortalecimiento y participación ciudadana en 20 municipios en materia de transparencia que el IEAIP implementó en el marco del laboratorio de cohesión social.
“Digamos que conozco desde el ámbito del órgano garante siendo unidad y desde sociedad civil, esto me ha permitido conocer hacer un análisis de cómo estamos en Oaxaca en materia de acceso a la información y los datos revelan es que no está siendo un derecho accesible a toda la población”, insistió.
La aspirante a comisionada consideró que se debe tener muy claro que el acceso a la información pública es un derecho humano, del que todas las personas debemos gozar, pero también es detonante para el acceso a otros derechos como la salud, educación, a la participación política y poder participar en la toma de decisiones de los gobiernos en los espacios públicos.
Mencionó que en materia de corrupción, es la transparencia y el ejercicio de acceso a la información pública, lo que también ayuda a inhibir las acciones de corrupción en autoridades de los diferentes niveles y poderes de gobierno.
María Tanivet Ramos consideró que otra de las grandes deficiencias y fallas en el IEAIP es que los espacios directivos son ocupados en su mayoría por hombres, no se está garantizando la paridad, y es ahí donde diputadas y diputados locales, del llamado congreso de la paridad, tienen un enorme compromiso para avanzar en esta materia, un reclamo de muchos años de la sociedad.
Con motivo de la competencia entre 19 aspirantes, la aspirante a comisionada del IEAIP aseguró que confía en un proceso de selección apegado a la legalidad, que será imparcial y no estará cargado hacia ningún o ninguna de las aspirantes por razones distintas a lo emitido dentro de la convocatoria.
Finalmente, sobre los señalamientos en su contra en algunos medios de comunicación, la aspirante a comisionada aseguró que no tienen ningún sustento, se le acusa de un presunto desvío de recursos en un espacio donde nunca estuvo a cargo del manejo financiero, sus actividades siempre fueron distintas.
Aclaró que sus funciones como consultora de un proyecto de laboratorio de cohesión social que implementó el órgano de transparencia, fueron coordinar operativamente al equipo técnico, hacer las actividades en campo, hacer la vinculación con autoridades municipales y cuidar los procesos de capacitación, generar materiales de difusión, rendir informes técnicos que la unión europea exigía, incluso en temas administrativos siempre se trabajó con asistencia técnica internacional.
“Ellos hacían los informes financieros y a nosotros nos correspondía hacer informes técnicos. Comencé en marzo 2016, seis meses de que el proyecto formalmente inició, me fui en febrero del 2018, un año antes de que culminara la ejecución de la acción. Nunca manejé recursos, ni siquiera estuve como personal del instituto, todos los recursos financieros estuvieron en manos de la dirección administrativa”, puntualizó.
