Juchitán de Zaragoza, Oaxaca (Cortamortaja).- Pese a que padres de familia y profesores señalaron que no existen avances de reconstrucción en sus planteles educativos, funcionarios estatales y federales que acudieron a la reunión prevista para el día de hoy en esta ciudad en el auditorio del Instituto Tecnológico del Istmo, se mantuvieron en la postura de que los trabajos “se están realizando sin contratiempos y en su totalidad”.
Los integrantes de la Sección XXII y padres de familia presentes, dijeron que la participación de los funcionarios en dicha reunión, dio inicio con el mismo discurso lleno de mentiras que siempre han utilizado (acusaron mentores y padres de familia), en cada una de las oportunidades que han tenido de reunirse y tratar el tema de la reconstrucción, que hoy particularmente pudo dejarse ver la incapacidad por parte de los representantes de las instancias encargadas del tema, para poder dar una solución favorable a la problemática existente.
Uno a uno padres de familia y maestros de diferentes escuelas de la región del Istmo, hicieron uso de la palabra en el recinto, para exhibir y reclamar a los funcionarios de manera directa, el estado que guarda cada de unos de los planteles educativos, mismos de los que coincidieron, no se reflejan los avances que los representantes del gobierno han gritado a los cuatro vientos, que existe hasta ahora.

Ante la serie de reclamos en su contra, los funcionarios buscaron en todo momento calmar los ánimos de coraje en los maestros y padres de familia, cosa que fue imposible debido, a que, no contaban con los suficientes argumentos ni respuestas que pudiesen cambiar el ambiente de tensión que existía en el lugar, debido a la realidad incongruente entre sus dichos y el avance de la reconstrucción de cada una de las escuelas, que los exhibía aun mas como blanco de una serie de irregularidades que vienen arrastrando desde el 2017.
Finalmente la reunión se fue disuadiendo, luego de que padres de familia exigieron apagaran los ventiladores que mantenían frescos a los funcionarios, -agregando- “apáguenles los ventiladores para que sientan lo que nuestros hijos sienten en las aulas provisionales”. Lo que causó molestia y desesperación entre las autoridades que buscaban el mejor argumento para irse del lugar sin dar respuesta a la demanda generalizada del magisterio y padres de familia.