El pretexto del gasolinazo y la diferenciación del precio de los combustibles motivaron el aumento de precios sin control en la carne de pollo, frijol, huevo y tortilla.
Ciudad de México.- La Diputada Federal Karina Barón presentó ante la Comisión permanente del H. Congreso de la Unión una proposición con punto de acuerdo en el que Exhorta a la Secretaría de Economía y a la Procuraduría Federal del Consumidor a vigilar y controlar los precios por kilogramo de masa y tortillas ante los efectos del “gasolinazo”.
La legisladora oaxaqueña denunció que no sólo la liberación de los precios de la gasolina y diesel ocurrió este inicio de año, también lo fue el de otros combustibles necesarios para el desarrollo de otras industrias como el gas propano y el butano.
Ante tal panorama, expuso que el país ha sufrido un efecto inflacionario en diversos sectores mercantiles, que han afectado directamente a la economía de todas las familias mexicanas, particularmente en los insumos de la canasta básica y en alimentos de primera necesidad como es el caso del precio de la masa y la tortilla.
De acuerdo con informaciones periodísticas y los reportes de la Procuraduría Federal del Consumidor entre el 2 y el 13 de enero, el precio de la tortilla se ha incrementado entre un 6 y 8% llegándose a vender en algunas entidades del país hasta en 19 pesos el kilogramo.
Señaló que este gasolinazo no midió las consecuencias sociales siendo particularmente insensible con los que menos tienen al no valorar y vislumbrar cuáles serían los impactos en la canasta básica. A esto se suma la especulación en la producción del alimento para realizar alzas injustificadas que perjudican a las familias mexicanas.
22 enero, 2017