La violencia feminicida se ha extendido a municipios que no cuentan con el mecanismo de acción-reacción y ha dejado víctimas cada vez más pequeñas tal como sucedió con una bebé de seis meses de San Francisco del Mar a quien le arrebataron la vida después de una agresión sexual.
Angélica Ayala Ortiz, presidenta del Grupo de Estudios sobre las Mujeres “Rosario Castellanos” (GESMujer), señaló que este hecho causa una profunda indignación, pues muestra los niveles incontrolables de violencia hacia las mujeres y las niñas.
“Hechos lamentables y dolorosos que no deben quedar en la impunidad, pues las consecuencias de la falta de acciones contundentes en la prevención, atención y sanción de la violencia hacia las mujeres y las niñas, está teniendo un costo muy alto, donde se coloca en riesgo su libertad, su integridad y su vida”, señaló.
Exigió que el feminicidio infantil debe ser motivo de alarma y de exigencia de justicia, pues en lo que va del año el 13 por ciento del total de asesinatos violentos, corresponde a menores de 12 años, el 23 por ciento de menores de 18 años.
“A nivel de prevención urge implementar acciones contundentes contra la misoginia, tanto en los hombres en general, como en quienes tienen a su cargo la responsabilidad de procurar e impartir justicia, es un tema prioritario a atender, ya que expresa la desvalorización y el odio hacia las mujeres y las niñas”.