El presidente municipal de San Antonino Castillo Velasco, Esteban Abel Sánchez Campos, es acusado de ejercer linchamiento y discriminación contra familiares de pacientes con Covid-19, con estas acciones el edil pretende deslindarse de responsabilidades, toda vez que al inicio del brote de la pandemia en la entidad ignoró los protocolos de la Jornada Nacional de Sana Distancia y con ello hubo un descuido a la salud de los habitantes de esta localidad de los Valles Centrales de Oaxaca.
De acuerdo con el último corte que presentó los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) el municipio de San Antonino Castillo Velasco cuenta con 10 casos confirmados de Covid-19, dos defunciones y cuatro recuperados. Los familiares de los afectados por esta enfermedad, señalaron que el edil hizo caso omiso a las recomendaciones de las autoridades de salud, lo que provocó una expansión del virus y ahora tras verse superado por esta enfermedad ha iniciado con actos de discriminación y linchamiento hacia las víctimas.
Aunque reconocen que se trata de una corresponsabilidad entre sociedad y gobierno, el enojo recae específicamente en el desdén que mostró el munícipe del partido Morena al no actuar en un principio para resguardar a la población. Los familiares quienes pidieron el anonimato, afirmaron que tampoco hubo una campaña de concientización y menos un control sanitario.
Lo que derivó en el aumento de casos en la comunidad, los familiares de los pacientes con el nuevo coronavirus recalcaron que el edil quiere lavarse las manos y culparlos por expandir el virus. “Sabemos que debe haber una responsabilidad en ambas partes, pero es injusto que ahora este señor quiera deslindarse de sus responsabilidades culpando a nuestras familias de traer el virus al pueblo y ahora la gente nos discrimina”.
San Antonio Castillo Velasco al ubicarse a escasos 40 minutos de la capital oaxaqueña, lo convirtió en un municipio de riesgo, por ello, los gobiernos estatal y federal convocaron a todas las poblaciones de la entidad y en específico aquellas situadas cerca de zonas conurbadas a someterse de forma estricta a los protocolos de sanidad, con el fin de prevenir contagios. Sin embargo, Sánchez Campos hizo caso omiso y no exhortó a los pobladores del peligro que la nueva enfermedad representaba.
