*Filtros sanitarios se refuerzan ante la pandemia, luego que el edil Oswaldo García Jarquín los abandonara
*En área de vectores de arbovirosis de los SSO, en Nuño del Mercado, hay cuatro trabajadores infectados, dos intubados en IMSS y uno más habría muerto
El ingreso a la Central de Abasto pareciera la puerta al purgatorio.
Un purgatorio en medio del corazón de Oaxaca que se debate entre una gloria casi inexistente y un estigma que se ha ganado a golpe de delincuencia, marginación y drogas. Hoy, un virus que pocos conocen y en el que nadie creía mantiene en parálisis a este centro comercial, el más grande de Oaxaca.
Policías, ladrones, madres y padres solteros, familias completas, comerciantes todos conviven en un solo lugar. Más de 12 mil almas expuestas a todo y nada.
Es lunes, no es día de descanso, pero es posible caminar sobre las calles de Mercaderes, Cosijopi, Yagul, Monte Albán, Contituyentes.
Entre cuchicheos, rumores y verdades, los pocos vendedores bajan de sus camiones frutas y verduras para ofrecerles a quienes aún se animan a ingresar a la zona, que ha cargado acuestas la marginación, olvido y ahora la responsabilidad de más de una docena contagios de Covid-19 y que ha quedado marcada con las lonas que indican: “zona de alto contagio de Covid-19”.
El de Abastos, corazón económico de la capital
En el de Abastos, los comerciantes fijos, semifijos y ambulantes se cuentan por miles así como los recursos económicos que ingresan a este recinto, uno de los más importantes no sólo en la capital sino también en el estado.
De acuerdo a los dirigentes de vendedores, tan sólo en la zona de tianguis se ubican más de cuatro mil expendedores y en donde se conglomeran más de 20 mil personas en los días sábados, lo que deja al menos de manera diaria más de tres millones de pesos en ganancias.
Abandono del municipio de Oaxaca de Juárez
Desde principios del mes de abril, los comerciantes de este recinto pidieron decenas de veces al edil de Oaxaca de Juárez, Oswaldo García Jarquin la aplicación de medidas sanitarias para evitar contagios.
En su momento el presidente del Frente de Comercio del Mercado de Abasto, José Luis Díaz Cabrera aseguró que se encontraban en la indefensión toda vez que no habían sido respaldados por la autoridad municipal.
Precisó que erogaron de sus bolsillos para la compra de cubrebocas, gel antibacterial y otros insumos para protegerse.
Establecen filtros después de la desgracia
El edil capitalino presumió en sus redes sociales, que reforzaría los cinco filtros que había instalado en la periferia, pero de acuerdo a Ermelinda Sánchez dirigente del recinto comercial “no había filtros, nadie atendió las denuncias, el presidente hizo caso hasta que el gobierno se involucró”.
Además el morenista Oswaldo García Jarquín se deslindó de garantizar la salud de las y los oaxaqueños al asegurar que si acuden a la Central de Abasto será bajo su propia responsabilidad.
Vestidos con overoles blancos y con su única arma: el termómetro, los trabajadores checan la temperatura al ingresar a este recinto, en donde se ha asegurado que al menos cuatro policías fueron contagiados; dos de ellos perdieron la vida.
Denuncian brote de Covid-19 en oficina de vectores
Trabajadores de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), que se ubican en Nuño del Mercado, muy cerca de la zona de contagio, denunciaron un brote de Covid-19 entre trabajadores de vectores específicamente en el área arbovirosis.
Señaló que el responsable del mismo Diego Vásquez Díaz, responsable de arbovirosis de la Jurisdicción Sanitaria número 1 de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), les negó la realización de pruebas del coronavirus.
Situación que ha provocado el fallecimiento de uno de los trabajadores; dos más se encuentran intubados en el IMSS y otros dos más contagiados.
Los empleados que omitieron sus generales por temor a represalias, expusieron que los han obligado a trabajar en la oficina ubicada en Nuño del Mercado pese a su cercanía con la Central de Abasto, el cual ha sido considerado como de alto riesgo de contagio.